En una pequeña villa ubicada en lo que hoy se conoce como el sector Las Vegas, surge la historia de la actual Buena Fe. Era el año 1943, cuando Medardo Espinoza Cabezas y Rosa Figueroa Carrillo llegaron a una zona en ese entonces poco poblada. Este sector es conocido como el barrio Las Vegas.
Allí la pareja tomó la decisión de rentar una villa donde se asentaron por años y como fuente de trabajo instalaron una tienda que llamaron ‘Buena Fe’, en honor a su creencia católica.
Con el paso del tiempo el negocio prosperó y se mantenía muy bien surtido. Por esta razón cuando los pobladores de las cercanías necesitaban comprar algo decían: “voy a la Buena Fe”. Lo cotidiano se hizo costumbre y la expresión se fue popularizando hasta que poco a poco y sin intención, fue la opinión popular la que le dio el nombre de la tienda a todo el sector, que hasta hoy tiene esa denominación.
Su emancipación
El 11 de octubre de 1979, el sector pasó a ser parroquia de Quevedo, mediante el decreto presidencial número 174.
Luego, el comité pro-cantonización, presidido por Gilberto Salinas, logró el decreto donde se le daba a la parroquia autonomía como cantón, el cual fue publicado en el Registro Oficial con el número 995. Fue el 7 de agosto de 1992, bajo la presidencia de Rodrigo Borja.
En la actualidad, la jurisdicción de Buena Fe se extiende en una zona muy fértil, en la que ha tomado un gran impulso la agroindustria, sobre todo en la producción de ganado, de carne, cacao, café, palma africana y gran variedad de frutas. (STG)