Comerciantes afectados por el aguaje en Crucita

Las calles del malecón de Crucita estaban llenas de arena la mañana de ayer.
Las calles del malecón de Crucita estaban llenas de arena la mañana de ayer.

Portoviejo, La Hora

En la madrugada del pasado sábado 31 de diciembre los habitantes de la parroquia Crucita de Portoviejo se llevaron un tremendo susto. Las olas del pacífico mar se volcaron hasta las calles del malecón, causando destrozos no solo al sector pesquero del lugar, sino a la belleza natural del baneario.
Ayer, después de dos días de aguaje, los habitantes de Crucita parecen más tranquilos. José López, miembro de la cooperativa Producción Pesquera Artesanal “Los Arenales”, señaló que esta situación es normal, pero entre febrero y marzo. “Nunca habíamos visto algo así en estos días, pero igual nosotros estamos enseñados y las únicas pérdidas que tenemos son económicas, pero por los destrozos que causan las olas”, argumentó el comerciante, quien añadió que la producción pesquera no disminuye.
“Pescamos lo suficiente y el único problema que tenemos es que el aguaje nos daña las embarcaciones”, argumentó López, quien mencionó que cuatro embarcaciones fueron afectadas la madrugada del sábado. “Conozco que ya las están arreglando”, dijo.
La belleza natural de la playa fue reducida a pequeños y empinados espacios, donde los turistas posaban ante las fuertes olas y el imponente sol.
“De aquí nomás veo, el mar está bravo”, comentó Francisco Menéndez, de 14 años, mientras estaba sentado en una de las sillas que había colocado su padre.
Así, entre un ambiente de incertidumbre, los turistas que llegan a disfrutar de este balneario manabita no dejan de pasar un momento ameno, que según los habitantes del lugar, cambiará en los próximos días para recibir la temporada de playa.

Sector pesquero
>> 50 asociados tiene la cooperativa Los Arenales.
>> 50 y 100 toneladas de pescado son las que recogen ellos por día.
>> 3.500 dólares es el costo de una embarcación pesquera.
>> 500 dólares, aproximadamente, es lo que cuesta arreglar una embarcación afectada por el aguaje.