Casa Blanca confirma un plan de retirada militar de Irak

WASHINGTON

La Casa Blanca confirmó este lunes que los jefes militares estadounidenses tienen un plan de retirada de un importante contingente de tropas de Irak, pero que este será adoptado dependiendo de «la situación en el lugar».

«Ése es uno de los planes que están en estudio», precisó el portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, en respuesta a preguntas de periodistas sobre un plan del general George Casey para reducir el número de brigadas de catorce a cinco o seis en diciembre de 2007.

Pero advirtió que una reducción del volumen del contingente estadounidense dependería «de la situación en el lugar».

El plan no está «grabado en una piedra», señaló Snow, tras confirmar que Casey se reunió el viernes con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush.

«En tiempo de guerra, no hay un plan único, monolítico», añadió el portavoz presidencial.

Según el New York Times, «las primeras reducciones de efectivos serían de dos brigadas de combate que dejarían Irak en septiembre sin ser reemplazadas. Estas brigadas, que cuentan con unos 3.500 hombres, no constituyen una parte significativa de las fuerzas estadounidenses en Irak, que llegan a 127.000 soldados».

El plan de Casey prevé la retirada de un total de 28.000 hombres de aquí a 2007, de los 130.000 que actualmente están destacados en el país del Golfo, informó la cadena televisiva NBC, citando altos funcionarios del gobierno.

El asunto es clave a cinco meses de las elecciones legislativas estadounidenses y se avizora como uno de los más polémicos en el debate previo a la campaña electoral, con 2.500 soldados estadounidenses muertos en Irak desde 2003.

La oposición demócrata presiona en este sentido, explotando la gran impopularidad del conflicto para intentar recuperar la mayoría en ambas cámaras legislativas.

La mayoría republicana progubernamental alega que la oposición no es responsable y la acusa de estar tentada por una «desbandada».

Desde hace algunos meses, el presidente Bush, que decidió la invasión de Irak en marzo de 2003, repite que la retirada será dictada por la situación de seguridad del país y por el avance en la formación del ejército de la policía iraquí. Pero el mandatario sufre una presión creciente para empezar la retirada de tropas antes de las elecciones de noviembre.

«Unos se guían por el calendario y otros, por los hechos en el lugar; hay una diferencia significativa», declaró el portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow

AFP