Ibarra, La Hora
Francisca, una mujer de 40 años de edad, aproximadamente, caminaba descontroladamente por los pasillos de la sala de emergencias del Hospital San Vicente de Paúl (HSVP), de un momento a otro su desesperación se convirtió en llanto y sus gritos en kichwa levantaban oraciones a Dios, pues ayer, antes de las 15h00, su familia fue víctima de un accidente vial.
El hecho ocurrió ayer a la altura de Natabuela. Un choque por alcance, del que fueron parte un bus de transporte interprovincial de la Cooperativa San Gabriel, de placas CAE- 299, y una camioneta concho de vino, de placas PFB- 770, terminó en tragedia.
El conductor de la camioneta, acompañado de su esposa y dos hijas, regresaba a su comunidad, Guamote, a cuatro horas de Riobamba, pero no logró su objetivo, pues realizó una mala maniobra y a causa de ello fue impactado por el transporte interprovincial.
Dos niñas que viajaban en el balde de la camioneta salieron disparadas y cayeron bruscamente contra el asfalto de la Panamericana, lo que les ocasionó serios golpes. Se trata de María Castro, de 12 años de edad, y su hermana Lourdes (6), quien llevó la peor parte, pues la pequeña cabeza de la menor presentó una gran abertura en la frente. La sangre de la niña quedó plasmada en la vía, como evidencia del fuerte golpe que recibió.
El drama
A las 14h39 la Central de Emergencias del 911 recibió la llamada que alertaba del hecho, de forma inmediata el personal del organismo y de otras entidades de auxilio
llegaron a Natabuela para auxiliar a las víctimas.
Las dos pequeñas fueron trasladadas al HSVP e ingresaron a la sala de emergencias: María se quejaba de los fuertes dolores, mientras que Lourdes estaba inconsciente y por su boca emanaba espuma.
Su madre, Francisca, con golpes y sangre en el rostro, esperaba en el pasillo. A las 15h08 la mujer recibió una de las peores noticias, su hija menor, a pesar de todos los esfuerzos de los galenos, falleció pues el fuerte golpe en la cabeza y las otras heridas hicieron que el corazón de la inocente niña deje de latir.
Los gritos de Francisca inundaron los pasillos del hospital y rogaba que su otra pequeña se salve. Paralelamente a este hecho, el padre de las niñas fue detenido para las investigaciones y el chofer del transporte público se dio a la fuga.
Incidente
Otros datos
La familia Castro llegó a Imbabura con el fin de comprar metal usado para luego volver a venderlo en su comunidad, pero el accidente de ayer cambió los planes que tenían.
Actualmente, el conductor de la camioneta está detenido en el Centro de Detención Provisional de Ibarra.
Hasta el lugar de los hechos llegaron integrantes del 911, Policía Nacional, Cuerpo de Bomberos de Ibarra y Panavial.