La cocina de Manabí, manifestación cultural con sabores tradicionales

PARTICULARIDAD. El manabita tiene una extraordinaria habilidad al momento de preparar los alimentos, al combinar sazones de la Costa y la Sierra.
PARTICULARIDAD. El manabita tiene una extraordinaria habilidad al momento de preparar los alimentos, al combinar sazones de la Costa y la Sierra.
PARTICULARIDAD. El manabita tiene una extraordinaria habilidad al momento de preparar los alimentos, al combinar sazones de la Costa y la Sierra.
PARTICULARIDAD. El manabita tiene una extraordinaria habilidad al momento de preparar los alimentos, al combinar sazones de la Costa y la Sierra.

Esta gastronomía del Litoral se suma a la lista de la riqueza inmaterial del país.

El Ministerio de Cultura y Patrimonio y el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural reconocieron recientemente a la Cocina Tradicional Manabita como Patrimonio Inmaterial del Ecuador. Entregaron una certificación en el marco de la Sesión Solemne por los 198 años de Independencia de Portoviejo, el pasado jueves.

El Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) Zonal 4, con la participación comunitaria y el apoyo del Gobierno Autónomo Descentralizado del Cantón Portoviejo, trabajaron en la investigación de esta gastronomía.

De acuerdo con el INPC, se efectuó el inventario que recopiló 142 fichas de cocinas tradicionales de las siete parroquias rurales del cantón Portoviejo; se identificaron técnicas y conocimientos con mayor vigencia y arraigo cultural en la preparación de alimentos con la utilización de productos de la zona.

Serie de conocimientos
La cocina manabita –aclara el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural– es una manifestación cultural que se encuentra registrada en el Sistema de Información del Patrimonio Cultural del Ecuador, al cumplir con los criterios de reconocimiento de patrimonio cultural inmaterial, correspondientes a la investigación realizada en Portoviejo.

EL DATO
En Crucita, por ejemplo, resalta la elaboración del viche y los conocimientos relacionados con el mar y las huertas.
Posee una serie de conocimientos y prácticas alimenticias tradicionales, trasmitidas de generación en generación, que han fortalecido la identidad, el sentido de pertenencia, el tejido social, la subsistencia y el desarrollo de la comunidad manabita.

Este reconocimiento se otorga al amparo de los artículos 70, 80 y 81 de la Ley Orgánica de Cultura, su Reglamento General y la Normativa Técnica de Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial. Esto, en consideración de que la cocina manabita abarca una riqueza de usos sociales, que incluyen una serie de prácticas en el cuidado de animales, uso de huertos, pesca y elaboración de objetos y herramientas tradicionales que sirven para elaborar platos representativos de la provincia.

Variedad de recursos naturales
La investigación, en la que participó de manera activa la comunidad, evidencia las técnicas y los usos sociales propios de las poblaciones de la parroquia Abdón Calderón, en la elaboración de las morcillas y otros derivados de cerdo. Las comunidades de Crucita en la realización del viche y en conocimientos relacionados con el mar y las huertas; y los pobladores de la parroquia de Colón que se destacan en la preparación de la chicha de maíz.

Esta gastronomía forma parte de la trama de una serie de conocimientos y métodos relacionados con los usos de las cuencas de los ríos Portoviejo (río Grande) y río Chico, además del mar, cuyo aprovechamiento de recursos naturales, siembra, actividades pecuarias y pesca artesanal para la obtención de alimentos requieren mecanismos de salvaguardia para continuar con su vigencia, señala el INPC. (PT)