La hora de liderar el cambio

Salvatore Foti

Ha llegado la hora de que Moreno encarne y lidere el proceso de cambio que el domingo el país le confió aprobando las preguntas que mandó a consulta. No podemos seguir con medidas tibias y a medias. Si bien es cierto que el ‘No’ perdió, también lo es que el correísmo cuenta con una identidad y una plataforma que se reconoce en su líder y tiene toda la intención de seguir peleando y ganar en cuanto se le presente la más mínima posibilidad.

Los que votaron por el ‘Sí’, consecuentemente, también necesitan de un líder capaz de llevar adelante reformas profundas y trascendentales dentro del aparato estatal y en el marco de políticas públicas contundentes.

El líder es Lenín Moreno, esto está claro. Lo que no está claro es cuándo y cómo la población empezará a ver los cambios que clama y al líder que necesita. Sería bueno, por ejemplo, que nos anuncie relevos urgentes dentro de su gabinete, en el cual hay ministros y ministras que en su momento sostuvieron a Correa y hoy no representan ninguna voluntad cambio.

Otra gran esperanza que muchos tienen al votar por el ‘Sí’ es que haya, a la brevedad posible, la renovación del equipo económico del cual todos y todas exigen más efectividad. La reactivación económica, más que contárnosla, deberíamos verla y vivirla por nosotros mismos. Nadie hasta hoy puede estar muy optimista con lo que pasa a nivel de generación de trabajo y bienestar económico en general.

Además, hay que pronunciarse y rectificar en calidad de Estado sobre temas que pudieron ir en la consulta y no fueron tomados en cuenta, como la Ley de Comunicación y las reformas aplicadas en contra de las universidades privadas. Es deber del gobierno devolverles su independencia, sacarlas del yugo estatal y desentrañar un política que solo logrará acabar con ellas. Necesitamos señales de democracia reales y pragmáticas. Un pronunciamiento sobre estos dos ejes sería un muy buen síntoma.

Hay muchos pendientes y deudas con el país a los cuales el Presidente deberá dar la cara. Hoy más que nunca tiene toda la autoridad para hacerlo. Esperemos sepa aprovechar este momento histórico.

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