‘Da Vinci’ es el robot con el que se realizan cirugías poco invasivas y permite una recuperación rápida.
La cirugía robótica se ha convertido en un gran apoyo para los cirujanos al permitirles tener mayor precisión en las incisiones y los movimientos interiores, porque el robot ‘Da Vinci’, que está siendo usado en el país, anula el temblor fino que tienen los especialistas.
‘Da Vinci’, del cual hay dos en el país, es una herramienta usada por el cirujano para realizar intervenciones mínimamente invasivas y con cortes precisos en las áreas de ginecología, urología, cirugías generales, ciertos procedimientos cardiacos y en intervenciones maxilofaciales, comentó el médico intensivista Estuardo Salgado.
“La cirugía robótica es considerada mucho más perfecta que el procedimiento laparoscópico, esto demuestra que en los últimos años ha habido evolución en este campo: después de las cirugías abiertas llegó el procedimiento laparoscópico mínimamente invasivo y con muchas ventajas, y ahora ha sido mejorado con la cirugía robótica”, detalló.
Los médicos se preparan
En la cirugía robótica que se está dando a conocer y difundiendo entre los médicos ecuatorianos y los pacientes, el que interviene es el cirujano experto en este campo, que comanda el robot desde una consola manejando los cuatro brazos de los que dispone, dos permiten manipular el entorno y los otros dos llevan cámaras de alta resolución que se introducen en orificios de apenas unos milímetros y que dan al galeno una visión 3D, magnificando 12 veces las imágenes lo que ayuda a ver vasos, venas, arterias pequeñas para evitar los cortes y los sangrados, explica el representante del hospital privado de Quito donde también se opera con Da Vinci.
Pero para ser considerado un cirujano robótico el especialista debe pasar por un largo procedimiento de estudios, capacitaciones y prácticas. En esta preparación primero el cirujano debe ser experto en su especialidad (general, urólogo, ginecología, pediatría…) y conocer muy bien la técnica de cirugía laparoscópica para comenzar su preparación en el área robótica.
La especialización comprende varios pasos que le llevan algún tiempo al médico cirujano para obtener la certificación respectiva. El entrenamiento comprende una inducción con prácticas en un simulador, la aprobación de cursos on line, entrenamiento con el robot, capacitaciones fuera del país (Colombia) para obtener una certificación de todo lo aprendido, entre otros aspectos.
Una vez que regresan al país, se les entrega la certificación respectiva después de haber aprobado el último entrenamiento y la capacitación que están bajo la conducción de un ‘proctor’, que es un experto en cirugía robótica con cientos de intervenciones en su especialidad, señala Salgado.
Las cirugías que se realizan
Con ‘Da Vinci’ es posible llevar a cabo todo tipo de cirugías, pero algunas de ellas tienen procedimientos simples que no justifican su uso, como por ejemplo una apendicectomía, dice Salgado.
La cirugía robótica se la aplica en ginecología, cirugía general, bariátrica, urología y oncología y, en la actualidad, está adentrándose a nivel cardiaco, de cuello y máxilofacial.
Sin embargo, ha tenido el máximo desarrollo en el campo de la urología con intervenciones en cáncer prostático, problemas congénitos (riñón, uréter y vejiga) y casos renales; en cirugía general se opera cáncer hepático, vías biliares, tumores de colon; en ginecología: histerectomía (extirpación del útero), cáncer de útero y ovarios. Debido a la “exactitud de los equipos se puede hacer las cirugías a la perfección, sin complicaciones y con recuperación inmediata”, asegura.
Este robot no se usa en cirugías de columna y de cerebro, campo en el que se valen de otros equipos como el Gamma Knife.
Lo positivo de la cirugía robótica es que disminuye los riesgos en el paciente. Además, los tiempos en quirófano y hospitalización se reducen debido a que es mínimamente invasiva, porque se hacen a través de tres incisiones de aproximadamente un centímetro cada una, lo que permite una rápida recuperación. (CM)
Detalles
Cirugía
El cirujano robótico debe tener por lo menos unas 20 cirugías robóticas para que sus procedimientos sean confiables y exitosos.
Un médico que recién se gradúa de cirujano robótico tiene que estar acompañado de un experto en sus primeras intervenciones.
En Ecuador hay especialistas en cirugías robóticas que se han formado en el Hospital Carlos Andrade Marín.