Una parroquia que lo tiene todo

LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)
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LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)
LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)
LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)
LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)
LUGAR. Las fiestas de la parroquia son motivo de celebración de toda su comunidad. (Foto Archivo)

La Siete de Octubre es una parroquia urbana que se caracteriza por su actividad comercial y gastronómica. El movimiento que se ve en sus calles es el reflejo de la prosperidad.

Quien vive aquí tiene el gran beneficio de no tener que ir muy lejos para conseguir lo que busca, pues en la zona hay gran variedad de ofertas para satisfacer las necesidades de los habitantes.

Es así como este sector se ha convertido en un referente de crecimiento económico en Quevedo, pues su gente es luchadora y visionaria, pero sobre todo es el motor principal para encaminar el progreso de este lugar.

No se puede dejar pasar desapercibido que además cuenta con instituciones públicas que están al servicio de los moradores como el Hospital Sagrado Corazón de Jesús, el Distrito del Ministerio de Inclusión Económica y Social, y algunas unidades educativas.

Reacciones

El presidente parroquial, Wilson Velasco, recordó que su familia fue una de las primeras en asentarse en una tierra bananera. Una vez que ya se establecieron como invasión, los dueños de las tierras les vendieron el espacio y fue así como empezó a poblarse lo que ahora se conoce como la parroquia Siete de Octubre.

“En la calle Progreso (June Guzmán), en el taller de ebanistería de mi padre, se hizo la primera reunión para organizar a la gente que no tenía vivienda y se formó una cooperativa que se llamó Siete de Octubre, de ahí nació el nombre”, dijo Velasco, tras aclarar que fue su padre uno de los precursores de este movimiento.

El dirigente requiere un espacio adecuado para que los comerciantes puedan expender sus productos de forma ordenada y darles un mejor servicio a los consumidores. “Debería de haber un mercado, es una parroquia amplia”, agregó.

Opiniones

Azucena Díaz lleva más de 30 años viviendo en este sector. Es donde conoció a su esposo, formó una familia y educó a sus hijos.

“Esta parroquia es linda, usted puede ir a buscar comida y se encuentra con varias opciones deliciosas, busca una farmacia y tiene varias para escoger”, comentó la mujer.

La popular calle Sexta está llena de vida por donde se la mire. Y es que hay pequeños comercios que dinamizan la economía del sector. Además existe una Unidad de Policía Comunitaria, un parque, un coliseo y cancha de usos múltiples.

Sin embargo, los moradores se muestran preocupados, pues alegan que se deben recuperar estos espacios de esparcimiento familiar, ya que en las noches no cuentan con suficiente iluminación, lo que atrae a personas a consumir sustancias sujetas a fiscalización y esto ahuyenta a los ciudadanos. (PPC)

La Siete de Octubre es una parroquia urbana que se caracteriza por su actividad comercial y gastronómica. El movimiento que se ve en sus calles es el reflejo de la prosperidad.

Quien vive aquí tiene el gran beneficio de no tener que ir muy lejos para conseguir lo que busca, pues en la zona hay gran variedad de ofertas para satisfacer las necesidades de los habitantes.

Es así como este sector se ha convertido en un referente de crecimiento económico en Quevedo, pues su gente es luchadora y visionaria, pero sobre todo es el motor principal para encaminar el progreso de este lugar.

No se puede dejar pasar desapercibido que además cuenta con instituciones públicas que están al servicio de los moradores como el Hospital Sagrado Corazón de Jesús, el Distrito del Ministerio de Inclusión Económica y Social, y algunas unidades educativas.

Reacciones

El presidente parroquial, Wilson Velasco, recordó que su familia fue una de las primeras en asentarse en una tierra bananera. Una vez que ya se establecieron como invasión, los dueños de las tierras les vendieron el espacio y fue así como empezó a poblarse lo que ahora se conoce como la parroquia Siete de Octubre.

“En la calle Progreso (June Guzmán), en el taller de ebanistería de mi padre, se hizo la primera reunión para organizar a la gente que no tenía vivienda y se formó una cooperativa que se llamó Siete de Octubre, de ahí nació el nombre”, dijo Velasco, tras aclarar que fue su padre uno de los precursores de este movimiento.

El dirigente requiere un espacio adecuado para que los comerciantes puedan expender sus productos de forma ordenada y darles un mejor servicio a los consumidores. “Debería de haber un mercado, es una parroquia amplia”, agregó.

Opiniones

Azucena Díaz lleva más de 30 años viviendo en este sector. Es donde conoció a su esposo, formó una familia y educó a sus hijos.

“Esta parroquia es linda, usted puede ir a buscar comida y se encuentra con varias opciones deliciosas, busca una farmacia y tiene varias para escoger”, comentó la mujer.

La popular calle Sexta está llena de vida por donde se la mire. Y es que hay pequeños comercios que dinamizan la economía del sector. Además existe una Unidad de Policía Comunitaria, un parque, un coliseo y cancha de usos múltiples.

Sin embargo, los moradores se muestran preocupados, pues alegan que se deben recuperar estos espacios de esparcimiento familiar, ya que en las noches no cuentan con suficiente iluminación, lo que atrae a personas a consumir sustancias sujetas a fiscalización y esto ahuyenta a los ciudadanos. (PPC)

La Siete de Octubre es una parroquia urbana que se caracteriza por su actividad comercial y gastronómica. El movimiento que se ve en sus calles es el reflejo de la prosperidad.

Quien vive aquí tiene el gran beneficio de no tener que ir muy lejos para conseguir lo que busca, pues en la zona hay gran variedad de ofertas para satisfacer las necesidades de los habitantes.

Es así como este sector se ha convertido en un referente de crecimiento económico en Quevedo, pues su gente es luchadora y visionaria, pero sobre todo es el motor principal para encaminar el progreso de este lugar.

No se puede dejar pasar desapercibido que además cuenta con instituciones públicas que están al servicio de los moradores como el Hospital Sagrado Corazón de Jesús, el Distrito del Ministerio de Inclusión Económica y Social, y algunas unidades educativas.

Reacciones

El presidente parroquial, Wilson Velasco, recordó que su familia fue una de las primeras en asentarse en una tierra bananera. Una vez que ya se establecieron como invasión, los dueños de las tierras les vendieron el espacio y fue así como empezó a poblarse lo que ahora se conoce como la parroquia Siete de Octubre.

“En la calle Progreso (June Guzmán), en el taller de ebanistería de mi padre, se hizo la primera reunión para organizar a la gente que no tenía vivienda y se formó una cooperativa que se llamó Siete de Octubre, de ahí nació el nombre”, dijo Velasco, tras aclarar que fue su padre uno de los precursores de este movimiento.

El dirigente requiere un espacio adecuado para que los comerciantes puedan expender sus productos de forma ordenada y darles un mejor servicio a los consumidores. “Debería de haber un mercado, es una parroquia amplia”, agregó.

Opiniones

Azucena Díaz lleva más de 30 años viviendo en este sector. Es donde conoció a su esposo, formó una familia y educó a sus hijos.

“Esta parroquia es linda, usted puede ir a buscar comida y se encuentra con varias opciones deliciosas, busca una farmacia y tiene varias para escoger”, comentó la mujer.

La popular calle Sexta está llena de vida por donde se la mire. Y es que hay pequeños comercios que dinamizan la economía del sector. Además existe una Unidad de Policía Comunitaria, un parque, un coliseo y cancha de usos múltiples.

Sin embargo, los moradores se muestran preocupados, pues alegan que se deben recuperar estos espacios de esparcimiento familiar, ya que en las noches no cuentan con suficiente iluminación, lo que atrae a personas a consumir sustancias sujetas a fiscalización y esto ahuyenta a los ciudadanos. (PPC)

La Siete de Octubre es una parroquia urbana que se caracteriza por su actividad comercial y gastronómica. El movimiento que se ve en sus calles es el reflejo de la prosperidad.

Quien vive aquí tiene el gran beneficio de no tener que ir muy lejos para conseguir lo que busca, pues en la zona hay gran variedad de ofertas para satisfacer las necesidades de los habitantes.

Es así como este sector se ha convertido en un referente de crecimiento económico en Quevedo, pues su gente es luchadora y visionaria, pero sobre todo es el motor principal para encaminar el progreso de este lugar.

No se puede dejar pasar desapercibido que además cuenta con instituciones públicas que están al servicio de los moradores como el Hospital Sagrado Corazón de Jesús, el Distrito del Ministerio de Inclusión Económica y Social, y algunas unidades educativas.

Reacciones

El presidente parroquial, Wilson Velasco, recordó que su familia fue una de las primeras en asentarse en una tierra bananera. Una vez que ya se establecieron como invasión, los dueños de las tierras les vendieron el espacio y fue así como empezó a poblarse lo que ahora se conoce como la parroquia Siete de Octubre.

“En la calle Progreso (June Guzmán), en el taller de ebanistería de mi padre, se hizo la primera reunión para organizar a la gente que no tenía vivienda y se formó una cooperativa que se llamó Siete de Octubre, de ahí nació el nombre”, dijo Velasco, tras aclarar que fue su padre uno de los precursores de este movimiento.

El dirigente requiere un espacio adecuado para que los comerciantes puedan expender sus productos de forma ordenada y darles un mejor servicio a los consumidores. “Debería de haber un mercado, es una parroquia amplia”, agregó.

Opiniones

Azucena Díaz lleva más de 30 años viviendo en este sector. Es donde conoció a su esposo, formó una familia y educó a sus hijos.

“Esta parroquia es linda, usted puede ir a buscar comida y se encuentra con varias opciones deliciosas, busca una farmacia y tiene varias para escoger”, comentó la mujer.

La popular calle Sexta está llena de vida por donde se la mire. Y es que hay pequeños comercios que dinamizan la economía del sector. Además existe una Unidad de Policía Comunitaria, un parque, un coliseo y cancha de usos múltiples.

Sin embargo, los moradores se muestran preocupados, pues alegan que se deben recuperar estos espacios de esparcimiento familiar, ya que en las noches no cuentan con suficiente iluminación, lo que atrae a personas a consumir sustancias sujetas a fiscalización y esto ahuyenta a los ciudadanos. (PPC)