“Una voz me decía que me fuera de casa”

Detalle. Ahora nuevamente la familia está unida.

Un menor, que fue reportado como desaparecido el jueves, apareció al día siguiente. Asegura que aprendió una lección de vida.

 

Redacción QUEVEDO

El jueves, 11 de febrero de 2021, las redes sociales se inundaron con la fotografía de un menor de edad y mensajes que llamaban a la colectividad a unirse a su búsqueda debido a que se encontraba desaparecido.

 Más de un ciudadano se unió a la causa e incluso LA HORA desde su cuenta de Facebook LA HORA LOS RÍOS compartió la publicación e invitaba a sus seguidores a colaborar con información para que la familia logre encontrarlo.

Un día después, el menor llegó a su hogar y junto a sus padres y hermanos de religión nos contó los difíciles momentos que vivió mientras permaneció en la calle, un lugar al cual nunca había ido solo en sus 14 años de vida.

¿Qué pasó?

André  vive en la parroquia San Cristóbal del cantón Quevedo, en la provincia de Los Ríos y fue visto por última vez a eso de las 09h30 del jueves cuando le vendió a una hermana de la iglesia unas empanadas, posteriormente desapareció.

Aún asustado, el menor cuenta que escuchaba que una voz que le hablaba en su interior y le decía que se fuera de la casa, pero esa no era la primera vez que sentía algo así; sin embargo, el jueves la voz desde su interior logró su objetivo e hizo que el menor se fuera sin dejar rastro.

“Tomé un bus con destino a Santo Domingo, estuve un rato en la calle y me dio frio, luego cogí un bus de regreso hasta Babahoyo donde pasé la noche durmiendo en la calle expuesto a muchos peligros, allí llegué a arrepentirme de lo que estaba haciendo. En medio de la tristeza y angustia escuché la voz de mi madre pidiendo que regresara  y tomé la decisión de retornar a mi hogar, nunca en mi vida me había pasado esto y aprendí una gran lección”, detalló el menor a LA HORA.

El viernes en la mañana, André fue llevado por sus padres hasta la iglesia donde frecuentan habitualmente, ubicada en el sector Isla del Río Quevedo (San Cristóbal). La algarabía en el lugar se sentía, sus familiares, amigos, hermanos de religión y otras personas tenían una gran sonrisa en sus rostros por tener de regreso al menor sano y salvo.

José P., padre de André, junto a su esposa, lo describen como muy aplicado y un ejemplo para muchos chicos. Tranquilo, educado y quien ayuda a su madre a vender empanadas para mejorar los ingresos de su hogar y quien en su tiempo libre practica deporte. “Un servidor de Dios”, recalca su padre.

Con todos esas características, aún sus allegados no salen del asombro al saber que los tuvo desesperado tras haber decidido abandonar el hogar. Ahora André y su familia se sienten muy agradecidos por la ayuda de amigos y desconocidos quienes viralizaron en redes sociales la desaparición de su hijo y a su vez agradecen a LA HORA por llevar el seguimiento del caso de su primogénito para que la gente conozca la verdad de lo que le ocurrió.  (LRV)