Siete años sin rastro de la joven quevedeña Luzmila Ramírez

desaparecida
DESAPARICIÓN. Luzmila Ramírez desapareció a la edad de 18 años en la ciudad de Machala.

Luzmila viajó a casa de unos parientes en Machala y fue en esa ciudad donde desapareció.

El sueño de convertirse en profesional de la medicina se desvaneció para Luzmila Elizabeth Ramírez Suárez cuando desapareció. Esta joven de 18 años, desapareció a las 09:17 del pasado 10 de octubre de 2016 en la ciudad de Machala, justo cuando se disponía a comenzar su carrera en medicina después de haber obtenido un cupo con una alta puntuación.

Su hermana Alexandra Cevallos Suárez, Luzmila viajó a casa de unos parientes en esa ciudad para completar la documentación necesaria y comenzar sus estudios en la Universidad Técnica de Machala, donde había sido aceptada.

Alexandra recuerda que habló con su hermana el mismo día en que desapareció, y que en cuestión de minutos, Luzmila pareció esfumarse.Su familia narra que, pocos días después de llegar a Machala desapareció sin dejar rastro, y desde entonces no ha vuelto a contestar el teléfono.

Alexandra recuerda vívidamente el día en que devolvió la llamada y se dio cuenta de que Luzmila ya no respondía.

«La señora donde se hospedaba mi hermana afirmó que no la buscáramos más, insinuando que Luzmila se había ido con su novio. Sin embargo, esto no era posible ya que su novio estaba en Quevedo en ese momento, y no desapareció después del suceso tampoco. Tuvimos que presentar la denuncia en Machala, y siempre nos cuestionaron, nos revisaron, sugiriendo que tal vez su desaparición fue voluntaria, entre otras cosas», expresó la hermana.

Han pasado siete años desde la desaparición de Luzmila, quien el pasado 5 de abril habría cumplido 25 años. Es por eso que su familia recuerda nuevamente los momentos felices que compartieron con ella, pero a la vez la tristeza los embarga al no tener una pista clara sobre lo que sucedió con Luzmila. «Solo nos dicen que continúan trabajando en la búsqueda, a pesar que hay una línea de investigación ahí se ha quedado todo», agregó la pariente.

«Mi niña, otro año sin ti. Ruego a Dios que te guíe de vuelta a casa y que quienes te hicieron daño sientan remordimiento hasta decir la verdad. Nos reconforta saber que seguimos buscándote. Te extrañamos mucho, Luzmila Ramírez.», publicó Alexandra en cuenta personal de Facebook.

Pistas sin respuestas

Otro episodio que también ha generado dudas entre los familiares es que, mientras ella estaba desaparecida, alguien que al parecer la conocía cobró el bono de solidaridad del cual ella era beneficiaria debido a su grado de discapacidad que padecía en sus ojos. Aunque esto se hizo público, los agentes investigadores no lograron dar con el paradero de la persona que cobró y que, por ende, había utilizado la cédula de identidad de Luzmila. Así lo explicó Alexandra.

Aunque el hallazgo del celular de Luzmila, luego de siete meses, parecía ser un avance esperanzador, la situación tomó un giro inesperado. Según información proporcionada por familiares, el dispositivo había pasado por las manos de tres propietarios distintos. Sin embargo, cuando finalmente se localizó, estaba en posesión de otra persona, quien afirmó haberlo adquirido en un establecimiento de reparación y venta de celulares. A pesar de estos acontecimientos, nadie ha sido relacionado con la desaparición de Luzmila, quien residía en la parroquia Venus del Río junto a su familia.

Alexandra expresó su frustración: ‘A pesar de tantas situaciones que hemos vivido, incluso la falta de empatía por parte de los agentes investigadores y las descoordinación en las direcciones proporcionadas por quienes participan en la búsqueda, nada parece funcionar. Más bien, nos tratan como sospechosos‘. Ella recuerda a su hermana todos los días como alguien alegre, entusiasta y positiva, quien daba vida a la familia y era los ojos de su madre. Ahora, su madre sufre dolencias en su salud debido a la desaparición de su hija más joven.

Alexandra ruega a las autoridades ecuatorianas que continúen con la búsqueda, ya que a pesar de haber agotado todos los esfuerzos, su familia todavía la esperan en casa o con respuestas que den con su paradero.

Desaparecidos

Según el registro del Gobierno para el periodo de enero a diciembre de 2023, se encontró que 403 personas reportadas como desaparecidas fueron halladas sin vida, lo que representa aproximadamente el 6% de todos los casos. Pichincha es la segunda provincia con mayor número de reportes. Por su parte, Guayas ocupa el primer lugar con el 17%, seguido por Santo Domingo de los Tsáchilas con el 7%. Estas tres provincias concentran la mitad de todos los casos reportados a nivel nacional. Los demás se han reportado casos en otras provincias como Esmeraldas, Morona Santiago, Imbabura, Chimborazo y Los Ríos. (LL)