Dudley Carabedo despidió a su hija Anaís, a tan solo dos meses de la muerte de uno de sus vástagos. Hubo capilla ardiente y lágrimas en el hospital del IESS de Babahoyo.
BABAHOYO • Dice un adagio popular que a los hijos les corresponde sepultar a sus padres, pero ese no fue el caso de Dudley Carabedo, de 59 años, quien en menos de dos meses debió sepultar a dos de ellos.
El primero fue Édison, quien murió en un accidente de tránsito en Guayaquil mientras esperaba el cambio de luz en un semáforo. Cuenta que en ese momento fue embestido por vehículo, cuyo conductor estaba ebrio.
Algo similar le pasó el viernes último a su hija Anaís, quien estaba conversando afuera de su casa y “un tipo borracho la arrasó, provocando también su muerte”, dijo el padre entre lágrimas a los medios de comunicación.
Observaba fijamente el cuerpo de su hija, ya en el féretro, mientras se preguntaba por qué tuvo que ser así. Su sepultura fue ayer.
Frente a este hecho, Carabedo recordaba que tres horas antes de la tragedia, había conversado con Anaís vía telefónica. Cuenta que nada hacía presagiar lo que ocurriría.
La familia ahora espera que los responsables de estos hechos para que sean sancionados. Comentaron que el supuesto responsable de la muerte de su hijo Edison está libre, tras recibir medidas sustitutivas. En tanto que el conductor del vehículo que cobró la vida de Anais, sí permanece detenido.
Lo que ocurrió
Aproximadamente a las 23:30 del viernes último, se registró un accidente de tránsito en la capital riosense, específicamente en las calles Vargas Machuca entre la K y la L, donde Anaís Carabedo perdió la vida.
Y es que una camioneta doble cabina perdió pista y se impactó contra una vivienda, donde resultaron heridas cuatro personas que se encontraban en exteriores del inmueble, siendo Anaís, de 30 años la persona más afectada preliminarmente.
Los heridos fueron trasladados hasta el hospital Martín Icaza, donde pocos minutos después se confirmó el fallecimiento de Anaís Carabedo, quien se desempeñaba como enfermera.
En tanto, el conductor del vehículo involucrado, fue detenido por parte de los agentes de la Agencia de Tránsito Municipal (ATM), quienes del interior de la camioneta, según los vecinos, habrían sacado una funda con varias botellas de licor, por lo que se presume que el conductor estaba en estado etílico. (DLH)