¿Por qué sustituir la leche animal por la vegetal?

¿Por qué sustituir la leche animal por la vegetal?
INTOLERANTE. Muchas personas son intolerantes a la leche de origen animal.

Con una preparación descomplicada se puede obtener una bebida deliciosa, saludable y nutritiva.

 Pese a que la mayoría de las personas siguen consumiendo leches de origen animal, expertos de la Nutrición recomiendan el consumo de productos con propiedades vegetales, tales como la leche u otras bebidas.

Estas leches tienen como únicos ingredientes aquellos que pertenecen al grupo de los vegetales, asimismo, incluyen agua y endulzantes naturales (en algunos casos). Con una preparación descomplicada se puede obtener una bebida deliciosa, saludable y nutritiva.  Son la opción ideal para aquellas personas alérgicas a la lactosa, ya que no produce diarrea, gases e hinchazón después de ser ingerida. Este malestar, denominado en el campo de la Medicina como absorción insuficiente de la lactosa, no suele generar graves complicaciones, sin embargo, los síntomas pueden ser molestosos.

Tipos de leches vegetales

Cada vez son más las personas que deciden cambiar sus hábitos de alimentación. La tendencia de consumir productos vegetales va en aumento, debido a las múltiples ventajas que aporta al organismo. Ante esta situación, la leche de origen animal es una de las bebidas que se suprime de la lista de compras. A cambio, existe la leche vegetal que en términos generales no contienen lactosa ni colesterol; es baja en grasas; posee un elevado porcentaje de grasas mono y poliinsaturadas, beneficiosas para el corazón; alto contenido en vitaminas B, por tanto, son perfectas para personas con digestiones lentas, problemas de estreñimiento o colon irritable.

PRODUCTO. La leche vegetal aporta múltiples beneficios a la salud.

Leche de soya

Se prepara a partir de una base de soja que carece de colesterol, siendo esta su principal característica. Los nutricionistas la recomiendan para prevenir la osteoporosis, o simplemente, es consumida como una alternativa a las leches animales. Tiene bajo contenido en grasas. Es rica en hidratos de carbono, fibra, minerales y posee vitaminas del grupo B. Estas cualidades la convierten en una bebida amigable con el sistema cardiovascular, además, ayuda a controlar el sobrepeso.

¿Cómo prepararla?

  1. Poner soya en remojo la noche anterior. 2. Al día siguiente cuela la soya y bátela junto con tres tazas de agua. 3. Cuela la leche de soya con una bolsa para hacer leches vegetales. 4. Añade la leche junto con otra taza de agua (250 mililitros) en una olla y pon el fuego al máximo hasta que hierva. 5. Retira la espuma que se forme con ayuda de una espumadera. 6. Cocina a fuego medio durante 20 minutos. 7. Cuando la leche esté fría puedes consumirla con el endulzante que prefieras (opcional).
PREPARACIÓN. La leche de soya se puede preparar con chocolate.

Leche de almendras

Es una de las más conocidas en el mercado. Es muy nutritiva, rica en proteínas y en vitaminas E, D y A. Tiene un alto contenido de omega 6, zinc, calcio, hierro, magnesio y potasio. Es baja en calorías. No contiene lactosa, lo que la convierte en una alternativa para los intolerantes. Ayuda al bienestar cardiovascular, pues contribuye a controlar los niveles de colesterol en la sangre. Su alto contenido en fibra también ayuda a la mejora del tránsito intestinal que, de manera directa e indirecta, contribuye al bienestar general de cualquier persona.

¿Cómo prepararla?

  1. Dejar las almendras en remojo durante, al menos, seis horas. 2. Transcurrido el tiempo de reposo, cuela el agua e incorpora las almendras a un procesador de alimentos o vaso de batir. 3. Añade el litro de agua, una pizca de sal y endulzante (opcional). 4. Batir todos los ingredientes hasta obtener una bebida completamente homogénea. 5. Verter la leche de almendras en un recipiente pasándola previamente por un colador. 6. Sirve caliente o llévala a la nevera para consumirla fría.

Leche de alpiste

Es rica en potasio, ayuda a retrasar el envejecimiento gracias a las enzimas y a los antioxidantes que contiene. Además de sus propiedades, favorece el metabolismo al tiempo que mejora la digestión, lo que contribuye a la reducción de peso. Ayuda a eliminar la grasa del organismo y a reducir los niveles de colesterol. Es buena para la prevención de la arteriosclerosis, de la hipertensión y sus propiedades antiinflamatorias son otros de los beneficios de este tipo de leche vegetal.

¿Cómo prepararla?

  1. Remoja el alpiste con dos tazas de agua durante toda una noche. Cuela y enjuaga. 2. Licúa con el agua. 3. Cuela con un colador de manta de cielo o una tela muy delgada. Oprime para extraer todo el líquido. 4. Vierte en un envase de vidrio con tapa, así te durará entre tres y cuatro días.

Leche de arroz

Es muy popular por sus componentes minerales: selenio, potasio, magnesio, hierro o almidón. A estas propiedades, hay que poner el foco en su alto contenido de ácidos grasos Omega 3 y 6, así como de vitaminas D y B12. Una circunstancia que convierte a este tipo de leche vegetal en un gran aliado contra la edad por sus poderes antioxidantes.

¿Cómo prepararla?

  1. En un bol con agua fría ponemos a remojar el arroz durante al menos una hora. 2. Pasado este tiempo lo colamos y lo ponemos en un recipiente junto con el litro de agua mineral. 3. Añadimos el aceite, la sal, la miel o el sirope y el extracto de vainilla o la canela molida. 4. Ponemos al fuego, llevamos a ebullición y dejamos cocer durante unos 15-20 minutos hasta que el arroz esté tierno. 5. Dejamos enfriar, trituramos bien y colamos.

 

TOME NOTA

Algunos factores de riesgo que hacen a una persona más
propensa a padecer intolerancia a la lactosa son la edad
avanzada y el nacimiento prematuro.

EL DATO

Las leches vegetales contienen hasta un 90% de agua.