Misteriosa salida de la comunidad Salesiana de Loja

Misteriosa salida de la comunidad Salesiana de Loja
UNIDAD. Exalumnas Salesianas de Cariamanga residentes en Loja, han permanecido unidas 50 años y 30 con la presencia de la comunidad Salesiana.

En un inesperado giro, las Hermanas Salesianas dejarán la parroquia eclesiástica de San Sebastián después de décadas de servicio. ¿Qué razones impulsaron esta salida y qué impacto tendrá en la comunidad que han dejado atrás?

Con más de tres décadas de presencia en la parroquia eclesiástica de San Sebastián, las Hermanas Salesianas se preparan para emprender una nueva etapa en su misión evangelizadora. La Hna. Superiora, Rosario Molina, anunció que el traslado a la ciudad de Cariamanga tiene como objetivo fortalecer su compromiso con la comunidad y seguir brindando apoyo a diversos grupos, incluyendo el de la Pastora Juvenil.

Durante su estancia en la parroquia, han enfatizado la importancia de los valores humanos y cristianos, fomentando el crecimiento personal y comunitario. Según la Hna. Rosario Molina, han cumplido humildemente con su misión de evangelización, contribuyendo al desarrollo de movimientos juveniles, formando priostes, monaguillos, ministros y exalumnas salesianas, así como cooperadores comprometidos.

Aunque reconocen que la parroquia ya ha sido evangelizada en gran medida, afirman que su presencia es requerida en otras partes del país. Sin embargo, su traslado a Cariamanga permitirá fortalecer la labor evangelizadora desde allí, manteniendo un vínculo con los grupos a los que han brindado apoyo durante años.

«Cada comunidad está comprometida a evangelizar y a ser un signo y expresión del amor de Dios», afirmó. Su misión se basa en el estilo formativo del sistema preventivo, que se adapta a los nuevos desafíos y exigencias del mundo actual. Además del trabajo con los jóvenes, se involucran en la formación humana y cristiana, la promoción de la vida y la defensa de un futuro de convivencia armoniosa.

Misteriosa salida de la comunidad Salesiana de Loja
COMPROMISO. Grupo pastoral juvenil de la Diócesis de Loja, desde hace 30 años, trabajaron con las Hermanas Salesianas.

El legado de las Hermanas en la parroquia eclesiástica de San Sebastián es innegable. Desde su llegada en 1944, han dejado una huella profunda a través de la creación de la Unidad Educativa María Auxiliadora, que ha formado a generaciones de niñas y señoritas que ahora sirven a la sociedad y son guías en sus hogares.

Ahora, en su nuevo destino en Cariamanga, esperan fortalecer la conciencia de ser discípulas misioneras de Jesucristo. Su misión se fundamenta en el mandato de Jesús de ir y hacer discípulos en todos los pueblos, adaptándose a las diversas realidades socioculturales y promoviendo la participación de las mujeres en el crecimiento personal, familiar, comunitario y social.

Desde allí continuarán vigilantes, para ver los frutos de su labor y seguir cultivando el carisma de Don Bosco, el amor a María Auxiliadora y los valores de prevención, acompañamiento y amor hacia los jóvenes y los niños.

Misión

Su acción misionera se enmarca en:

  • Se fundamenta en el mandato de Jesús: Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos y bautícenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
  • Que constituye un elemento esencial de la identidad del Instituto y expresión de su universalidad, presente en nuestra historia desde los orígenes.
  • Realizada en la unicidad del carisma y en el pluralismo de situaciones socioculturales con la adaptabilidad, audacia y creatividad de Don Bosco y de Madre Mazzarello.
  • Inserta en una realidad cada vez más pluricultural y con diversidad de creencias religiosas con prospectiva evangelizadora, que compromete a renovar la pasión por el primer anuncio, la catequesis, la misión ad-inter gentes.
  • Que exige un estilo de vida pobre, solidaria, alegre, sencilla y de trabajo que permita madurar actitudes, asumir comportamientos y saberes cotidianos capaces de superar el etnocentrismo.
  • Que trabaja en la formación humana y cristiana con intervenciones educativo-evangelizadoras en defensa de la vida por un futuro de mejor convivencia.
  • Que promueve las celebraciones y los ritos propios de cada pueblo con prospectiva de crear ambientes para que los y las jóvenes indígenas realicen el seguimiento de Jesucristo desde sus valores culturales.
  • Donde la mujer sea protagonista de su crecimiento personal, familiar, comunitario y social, elemento clave para la evangelización y el desarrollo humano.
  • Que desde el carisma salesiano colabora y se inserta en la Iglesia local.