Colectivos feministas exigieron políticas para combatir la violencia de género

MARCHA. Mujeres de Loja presentes en la marcha del 8M.

Rosibel Encalada

La marcha, impulsada por una coalición de 12 organizaciones de mujeres, tuvo como propósito consolidar su influencia ante el Estado, exigiendo la garantía de sus derechos y la implementación de políticas públicas efectivas que aborden el desempleo, la precariedad educativa y la problemática de los femicidios.

El 8 de marzo, en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, Acción Feminista por la Paz, una coalición de 12 organizaciones de mujeres, lideró la marcha y batucada denominada ‘Disidencia Feminista 8M 2024’ en la ciudad de Loja. El propósito principal fue abogar por los derechos de las mujeres, instando al Estado a implementar políticas públicas destinadas a prevenir y erradicar el desempleo, evitar recortes presupuestarios en la educación superior y combatir los casos de femicidios.

La concentración fue en la plaza San Francisco desde las 17:00, en donde el sonido de los tambores dirigido por la batucada movió a todos los participantes con pañuelos morados a formar una ronda para cantar sus consignas musicales y mencionar las causas que las mueven como ser el grito de las que ya no están. En el primer trimestre de 2024 se han perpetrado 35 femicidios y en Loja, siete casos.

PEDIDO. Disidencia Feminista 8M2024 alza la voz por derechos e igualdad.

La frase ‘Mi silencio no será más tu comodidad’ encuentra su ejemplo en un incidente ocurrido en noviembre de 2023, donde dos estudiantes de Tercero de bachillerato de un colegio en Guayaquil fueron víctimas de violación por parte de sus compañeros de aula durante un viaje de curso. Este impactante suceso conmovió a Paula, una estudiante de 17 años, quien reflexionó al respecto: «Es una chica de nuestra edad. Tenemos que concientizar que a cualquiera nos puede pasar y debemos tener cuidado”, expresó.

¡Alerta! La voz de aviso que tomó la calle Simón Bolívar, comunicando que la marcha iniciaba y exigía un vida justa y libre de violencia machista y de genero hacia el estado. Manuela Aguirre, psicóloga clínica de Chile, después de escuchar las historias de sus pacientes, afirmó que un 99% de ellas han sido abusadas.

“Aún falta mucho por hacer, resistir y protestar. Estamos aquí porque queremos una mejor vida para quienes vienen detrás de nosotras”, dijo una representante del movimiento, el cual fue acompañado por jóvenes mujeres y hombres, padres de familia, niñas y niños. Andrea Segarra, docente de pedagogía de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL), percibía este momento desde la vereda al ver estudiantes suyas y muchos jóvenes formados con criterio.