Desde hace meses, la Prefectura de Loja ha estado trabajando en una alternativa para el mantenimiento del sistema vial asfaltado, financiada por contribuciones de la ciudadanía. Mario Mancino, prefecto, ha liderado reuniones y diálogos con diversos sectores para obtener sugerencias y perfeccionar la propuesta. “Ha sido importante poder reunirnos con la sociedad civil, colegios de profesionales y otros sectores, ahora esto se ha plasmado en un borrador que buscará ser socializado en la Cámara Provincial a través de una sesión extraordinaria que se desarrollaría en los siguientes días”.
Finalidad
La finalidad de esta propuesta es recaudar fondos significativos para atender la vialidad rural de la provincia, especialmente ante el insuficiente presupuesto estatal destinado a mantener los 630 kilómetros de vías rurales existentes. Mancino destacó que esto responde a los requisitos del Banco de Desarrollo (BEDE) y a la necesidad de generar recursos propios para el Gobierno Provincial. “Hay varios retrasos en la entrega y esto nos hace ver débiles dependiendo del aporte estatal, el GPL debe generar sus propios recursos y este es el camino para lograrlo y atender al sector rural”.
El prefecto subrayó que, de concretarse según lo previsto, el sistema entraría en funcionamiento en 2024, con una estabilización de la recaudación esperada a finales de 2026. Se estima que este fondo genere entre $1´.100.000 y $1´.200.000 anuales, crucial para el mantenimiento rutinario que requiere una inversión cercana a los $2´.500.000.