El número de precandidatos presidenciales de nuestro pequeño país es asombroso, una cifra mayor a la población que tenemos son: 28 los contendientes para esté cargo.
La politiquería nacional no deja de llamar la atención a nuestros ciudadanos y pueblo, que tenemos que fragmentar al electorado en partes muy pequeñas para que los votos alcance para todos, nos damos cuenta que entre estos candidatos existen sin lugar a duda ciertos personajes que llaman mucho la atención y demuestran una total ambición, desvergüenza y politiquería al presentarse ante la gente y el pueblo a pedir que confiemos en ellos y en sus falsas promesas como nuevos redentores de la patria.
Lo admirable es que existen precandidatos que muy difícilmente nuestra gente vuelva a votar por ellos, para ganarse un buen nombre que lo dejaron atrás por errores del pasado, es hora de meditar y reconocer todos los errores del pasado y las buenas y malas acciones de todos quienes pretenden mancillar de nuevo el nombre de nuestro país, ofreciendo cosas que están muy lejos de cumplir, porque en cuanto llegan al poder el ego se les sube a la cabeza y comienza la debacle económica, social y política de nuestra desafortunada patria.
Debemos responsablemente comenzar a descubrir cuáles son las características personales y profesionales de cada candidato, conocer que personajes están tras de sus candidaturas y por sobre todas las cosas que se identifiquen con alguna línea política específica de pensamiento, cumplimiento de lo que hoy necesita el pueblo, para el pueblo.
Seamos claros y precisos entendamos que va a pasar con esta pandemia y que nos repara para poder resurgir de este mal y seguir adelante en estas nuevas elecciones que se nos avecinan, con un país como lo está el nuestro sin fuentes de trabajo y con mucha gente desocupada. El pueblo hoy en día necesitamos una atentica democracia.