Polémica por campaña en Internet en contra del enfoque de género

CAMPAÑA. Los fines de semana se entrega información en los parques de Quito.
CAMPAÑA. Los fines de semana se entrega información en los parques de Quito.

La batalla contra la llamada “ideología de género” llegó a Ecuador. Su germen está en los grupos religiosos que en varios países se quejan de que la educación sexual en las escuelas está basada en “teorías que puede confundir a los niños respecto a la identidad sexual de cada uno”. Su trinchera son las redes sociales, donde mantienen la etiqueta: “Con mis hijos no te metas”. Algunas personalidades religiosas hacen de cabezas visibles del movimiento. En el caso de Ecuador, el sacerdote César Piechestein, vocero de la Arquidiócesis de Guayaquil, es uno de sus altoparlantes, y desde su cuenta personal convoca a marchas y jornadas de oración.

Virginia Gómez de La Torre, del Frente Ecuatoriano por la Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos, explica que los grupos conservadores hacen “una recreación marketinera del enfoque de género y lo usan como muletilla para desprestigiar una herramienta técnica que ayuda a la gente a aprender de la realidad diversa”.

La campaña sataniza la educación con enfoque de género y asegura que se quiere enseñar que “no existe ninguna diferencia entre un niño y una niña” y a partir de esto se empieza a especular con frases como: “los niños podrían escoger una identidad sexual”, “esto les llevará a una sexualización precoz”, “no existirá control de métodos anticonceptivos”.

La activación de la campaña en Ecuador coincide con el cambio de Gobierno y la desaparición de programas de educación sexual que se basaban en la abstinencia, como el Plan Familia, que fue derogado por el presidente, Lenín Moreno. El plan chocó contra la evidencia de que cada vez más adolescentes de entre 12 y 19 años inician su vida sexual en estos años (un 23% en 2012, comparado con el 15% en 2006) y que muchos lo hacen sin protección. Del total de mujeres adolescentes que tuvieron relaciones sexuales, la mitad (51.9%) alguna vez se quedó embarazada, según la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición.

Gómez de La Torre explica que “la campaña de mentira y de odio” de los grupos religiosos ha sido especialmente agresiva en países como Bolivia y Chile donde los movimientos de mujeres han conseguido que las legislaciones responden a sus pedidos como despenalizar el aborto. “Esta gente siente que está perdiendo, pero sus tesis no resisten el más mínimo análisis”, señala.

La activista considera que a estos grupos les incomoda la voluntad política para atender las demandas de las mujeres que existe ahora. “El Gobierno inéditamente abre un canal de diálogo con las mujeres, la posibilidad de una nueva ley contra la violencia contra las mujeres. Eso es algo que causa enojo en esos grupos”, concluye. (SCA)