Desalojo frustra el ‘sueño’ de tener una casa propia

DESTRUCCIÓN. Con maquinaria pesada se derribaron las improvisadas casas.

La inscripción para adquirir un terreno de 15 por 8 en estos predios, era de 158 dólares. Hay personas que han separado con 20 dólares y están cancelando poco a poco.

El no contar con recursos económicos para comprar un terreno legalizado o una casa con las condiciones para vivir, motivó a un número considerable de personas a invadir unos terrenos que están ubicados en la vía Esmeraldas- Atacames, cerca del complejo La Pradera, y parar covachas en el área que le correspondía a cada familia. No obstante, la mañana de ayer, sábado 27 de marzo,  el esfuerzo de estas personas fue echado al suelo cuando inició el desalojo.

En esa área se habían levantado casas con madera, caña guadúa y láminas de zinc. Unos ya vivían ahí, habían colocado negocios, mientras que otros iban todos los días a continuar construyendo o a supervisar su propiedad, hasta que ayer llegaron miembros de la Policía Nacional, maquinarias y empezaron a demoler las improvisadas viviendas.

En los perjudicados solo había rostro de desconsuelo, porque dicen que no fueron notificados. “Si nos hubiesen avisado nosotros sacábamos la madera y nuestras cosas para que no las destruyan las maquinarias” dijo una joven. Para ser parte de la invasión tuvieron que pagar 150 dólares, unos lo hicieron de contado y otros lo hacían  con abonos.

Perjudicados

Stefannia A. es una de las perjudicadas, quien entristecida por lo sucedido, comentó, que esos predios eran matorrales hasta que apareció una persona ofertando terrenos a cambio de dinero. Ella con su esposo pagaron 150 dólares, que era el valor por la inscripción, y desde la segunda semana de febrero del presente año, empezaron a comprar la madera para ir parando poco a poco lo que sería su casa.

Un jefe de familia, corroboró el pago por la inscripción. Él no está entre los perjudicados de ayer, porque pertenece a la segunda etapa que sería de otro dueño. Agrega que la inscripción por un terreno de 15 por 8, cuesta 158 dólares. El dinero lo entrega a una secretaria pero  no les dan recibo para respaldar el pago.

INVASIÓN. El sueño de muchas personas por tener casa propia, fue desechado.

 

Las estructuras fueron derribadas con maquinarias y, los enseres destruidos, algunos de los perjudicados, lograron rescatar algunas de sus pertenencias.