Hasta el momento, todo intento del presidente Guillermo Lasso de transformar profundamente la economía del país ha sido bloqueado bajo los mismos argumentos: la precarización de los trabajadores y el costo para la ciudadanía. Ahora, con el proyecto de Ley de Inversiones, la oposición en la Asamblea no tendrá excusas.
La propuesta busca generar nueva actividad económica y nuevos puestos de trabajo sin endurecer las condiciones de vida y trabajo de nadie, sino apenas en base a exenciones tributarias y una mejora de la eficiencia estatal.
El proyecto persigue atraer 30.000 millones de dólares en inversiones. Actualmente, la inversión extranjera directa no alcanza los mil millones de dólares. La que promete esta ley parece una suma inmensa frente a la realidad nacional, pero resulta absolutamente corriente y factible en el contexto de las posibilidades que ofrece la economía global.
Ecuador está lleno de oportunidades que no se han podido aprovechar por falta de distintos recursos. Esta ley —cuyos ejes son la creación de zonas francas, un mejoramiento de las alianzas público-privadas y el fortalecimiento del mercado de valores— permitiría al país beneficiarse, finalmente, de la inmensa cantidad de liquidez que existe en el mundo, atraer de vuelta los capitales nacionales que han sido expulsados por políticas erróneas y abusivas y, sobre todo, aprovechar su momento demográfico único, con millones de personas en edad productiva. Ahora veremos si es que los legisladores de oposición son objetores ideológicos o simples peones al servicio de una economía rentista y cerrada.
FRASES DEL DÍA
«La mejor enseñanza es la que utiliza la menor cantidad de palabras necesarias para la tarea.”
María Montessori (1870-1952), educadora italiana
«Ser capaz de olvidar es la base de la cordura.”
Jack London (1876-1916) Escritor estadounidense