Ucrania sí nos golpea

Cecilia Chacón

El último informe especial de la Cepal, la -Comisión Económica para América Latina y el Caribe- publicado este 6 de junio del 2022 explica sobre las repercusiones de la guerra de Ucrania en América Latina y el Caribe.  Este lejano país y su actual realidad, incide en la desaceleración económica, activa la inflación, doblega las intenciones de la recuperación económica, laboral lo que aumenta los niveles de pobreza y pobreza extrema en la región.

Las guerras en el mundo y ésta en especial con Rusia, con su tremendo poder globalizante, se suma a las crisis ya con larga data, así: el duro escenario financiero internacional, la tensa relación de Estados Unidos con China y las pandemias por citar algunas de los últimos diez años como la fiebre aviar, la H1N1, Covid-19, la viruela del mono. Esto hace pensar que las economías, la salud, el empleo, la educación se encuentran seriamente afectadas en el mundo y en la región.

El alza de precios de los productos energéticos, de los alimentos, el incremento de los costos del transporte internacional, los problemas de colocación de productos en los mercados internacionales contribuyen a la inflación global. Estos tropiezos, “por decirlo de alguna manera” vulneran las exiguas economías de los países latinoamericanos que anclamos no solo productos sino esperanzas en la provisión de materia prima y otros servicios a Europa y Asia.

La incertidumbre global nos afecta, incluyendo al Ecuador, considerado país de renta media, que lucha por mantener la dolarización a toda costa, con nuevos casos por Covid-19, con altos índices de violencia, con paros, con el nuevo trajín electoral, con lo político y lo politiquero, notándose que la crisis estructural es también social, de valores y de sentido común. Pero no justifica que vivamos a la sombra del temor.

Es necesario, a la luz de las crisis, insistir en un proyecto de ciudad, de provincia, de país, insistir en ecuatorianos de bien, en un país que, si no arrimamos el hombro, se desmorona.