Nueva dinámica

Después de las elecciones en el Ecuador se generó un efecto alentador en cuanto a la perspectiva económica a mediano plazo, la previsión de crecimiento es del 2.8% con tendencia al alza y esto se evidenció en la dinámica empresarial de los últimos meses, en efecto, muchos inversionistas tienen más confianza en emprender proyectos y muchos países que nos veían con recelo han puesto los ojos en el Ecuador, existe de cierta manera una expectativa de estabilidad jurídica para los siguientes años y varias personas que tenían desconfianza hasta antes de las elecciones pudieron respirar con tranquilidad y no mirar a otros países para colocar sus capitales, si bien los problemas no se solucionan de la noche a la mañana si se puede sentir un cambio en el entorno, eso ocurre cuando el líder de un país enfoca sus esfuerzos en encontrar soluciones a largo plazo, acuerdos comerciales con países que nos pueden traer beneficios, eso se llama practicidad, antes las visitas oficiales eran estrictamente ideológicas, es decir, Cuba, Bielorrusia, Venezuela o Bolivia y con el debido respeto pero no nos traían ningún tipo de provecho sino un capricho del Presidente del momento, ahora es distinto, los objetivos son claros y pese a que aún falta mucho por hacer vale la pena considerar ciertos criterios como el de la calificadora de riesgos Fitch que ha considerado cuatro factores que inciden en esta nueva perspectiva hacia el Ecuador, un bajo riesgo de no pago de la deuda a corto plazo, un plan de políticas económicas a mediano plazo, el apoyo del FMI junto a un plan de reformas estructurales, todos estos en la agenda del Presidente Lasso, de igual manera la seguridad que se le ha dado a la dolarización permite tener un norte mucho más claro sin dejar de lado aún el déficit fiscal heredado y ciertos problemas de gobernabilidad que se puedan dar en el camino, sin embargo es deber de todos los ecuatorianos apoyar las buenas iniciativas y dejar las rencillas ideológicas a un lado.