A los neocomunistas (narco-comunistas, terroristas, guerrilleros urbanos, narco-terroristas, «progresistas», socialistas del s.XXI) que desean convertir nuestro país en otra Cuba, con sus amenazas, protestas, vandalismo, saqueo, caos, les sugerimos irse del país que construyeron los abuelos de nuestros tatarabuelos, porque toleramos su ideología y hasta sus aberraciones, pero no podemos tolerar que pretendan imponerlas.
Esta es nuestra Patria, nuestra bandera, nuestro himno.
La mayoría creemos en Dios, forma parte de nuestras costumbres, creencias, tradiciones, nuestro modo de vida.
Nuestra cultura mestiza fue desarrollada por nuestros ancestros que lucharon por la organización política republicana, en base a los principios: Dios, Patria, Libertad, Tierra y Propiedad, en la búsqueda del bien común.
Nos gusta disfrutar de nuestras fiestas religiosas y comidas tradicionales, es parte de nuestra cultura el juego de pelota de tabla, de gallos finos, la corrida de toros bravos, los disfrazados, las cabalgatas.
Si a ustedes no les agrada, ¡váyanse! No pretendan imponernos su aculturación ideológica, su adoctrinamiento marxista, foráneo, anacrónico.
Sean felices en los «paraísos comunistas»: Cuba, Nicaragua, Venezuela, Corea del Norte, pero ni siquiera piensen que vamos a adoptar sus aberraciones; son ustedes los desadaptados.
Mariátegui se equivocó por idealizar, en el incario no había «comunismo agrario», fue un estado esclavista, racista, excluyente.
Tú, iza, y tus acólitos, en el incario habrían sido mitayos, no «dirigentes».
Adáptense a la cultura forjada por nuestros y vuestros ancestros, no traicionen su memoria, sean auténticos, orgullosos de nuestra identidad mestiza y disfruten de nuestro hermoso país, sin destruirlo.