Juan Montalvo

Por: Ramiro Ruiz R.

Don Marcos Montalvo, inmigrante de ascendencia andaluz y comerciante de profesión, conoció a doña Josefa Fiallos Villacrés, con quien se casó el 20 de enero de 1811. De aquel matrimonio nacieron ocho hijos. Juan Montalvo vio la luz por primera vez en Ambato, el 13 de abril de 1832.

En su vida fue constante lector y por esta razón recibió la influencia de infinidad de autores. Las obras del Romanticismo le alimentaron en la necesidad de romper esquemas, perfeccionar la imaginación y la fantasía. Admiró la literatura especialmente de los pensadores franceses que lograron agitar a escritores hispanoamericanos antes y después de las guerras de independencia en las naciones del continente.

Juan Montalvo hasta hoy es uno de los escritores más célebres en Latinoamérica y Europa. Su pensamiento apuntó al reconocimiento de la libertad y el respeto del individuo, así como el desprecio de todo aquello que limitara las libertades legítimas.

¿Por qué se escogió del nacimiento de Juan Montalvo para honrar al magisterio ecuatoriano? Por su pensamiento, y la relación de actitud y  conducta de vida que se puede aplicar a la realidad ecuatoriana actual.

Los principios liberales de Montalvo compaginan con su idealismo. Escribió las bases de cualquier nación, que para él fue la moral de quienes eran designados para gobernantes.

Despreció a los gobiernos que acomodaban las leyes para su propio beneficio y a las tiranías que pasaban por encima de la ley. Consideró que una de las condiciones necesarias para que exista una dictadura es cuando el pueblo esté dispuesto a soportarla por miedo o indolencia.

Escribió contra la corrupción y el despotismo. Observemos algunos ejemplos: “Robar a la Nación es robar a todos; el que roba es dos, cuatro y diez veces ladrón; roba al que ara y siembra, roba al que empina el hacha, al que acomete al yunque, roba al que se une al trabajo común con el alma puesta en su pincel; roba al agricultor, al artesano, al artista; roba al padre de familia; roba al profesor; roba al grande, roba al chico. Todos son contribuyentes del Estado; el que roba al Estado a todos roba, y todos deben perseguirlo por derecho propio y por derecho público”.

“Roba, pero hace obras”, esta frase debemos condenarla y borrarla de nuestras mentes.

“Los tres poderes que constituyen el gobierno van a dar todas a un hombre en el despotismo: el príncipe es legislador, ejecutor de las leyes, administrador de justicia. En esta forma de gobierno el equilibrio de los poderes no tiene cabida: semejante a un espejo cóncavo, absorbe todos los rayos del sol, y el déspota es muy dueño de agraciar a sus súbditos, o de tragarse la luz y convertirla en tinieblas en sus voraces entrañas”.  (El Regenerador)

Son culpables de la tiranía tanto el pueblo como el tirano, en la misma medida. Defendió los derechos de la mujer y el de minorías: indígenas, y afroamericanos.

Publicó sus ideas liberales en un tiempo en que las antiguas tradiciones junto a las ideas religiosas dominaban el horizonte de su tiempo. Juan Montalvo no sólo es un ejemplo histórico, es referente de maestros, de los niños y jóvenes. Ellos tienen la encrucijada de caminar por la aventura del pensamiento lógico y recibir una formación ética.