Rodrigo Contero Peñafiel
La astucia es común en muchos servidores públicos que, ante la incapacidad de solucionar problemas, eluden responsabilidades o hacen méritos para quedarse en un puesto para el que no están preparados. Algunas personas, cuyo rendimiento se ha invisibilizado o se ha diluido en el tiempo, suelen recurrir a estos engaños para justificar su ineficiencia.
Luego de diez años de reclamo y aclaraciones legales de toda naturaleza, el IESS se ve obligado a pagar a sus extrabajadores despedidos ilegalmente. En ese tiempo, 12.000 trabajadores eran muchos; hoy son 38.000, con mayores salarios y una tecnología más avanzada.
El 10 de febrero de 2021, en el caso 15-14-AN por acción de incumplimiento, la Corte Constitucional ordenó “el pago de la jubilación total o proporcional para todos los accionantes que cumplan con el tiempo y demás presupuestos exigidos… para el caso de la jubilación patronal proporcional, los beneficiarios deberán haber cumplido veinte años o más de servicio continuo o interrumpido de la entidad, a la fecha en que se efectivizó la cesación de sus funciones por intermedio de la supresión de sus partidas presupuestarias, figura equiparable al despido intempestivo en el presente caso”.
La sentencia se cumplió parcialmente en febrero de 2022. Ante el reclamo presentado por los accionantes, la División de RRHH del IESS ha solicitado la documentación correspondiente para establecer el cálculo pertinente, de acuerdo con las resoluciones emitidas por el Consejo Superior del IESS. Una de ellas, la No. 476 que regula la jubilación patronal y en la que se señala que “el derecho adquirido es del 25% del salario básico unificado como pensión mínima de jubilación patronal”.
Mientras tanto, las Direcciones General y de Recursos Humanos del IESS incumplen dicha resolución pagando 20 dólares mensuales, en lugar de lo que dispone la ley. Aunque la sentencia de la Corte Constitucional fue un paso hacia la justicia, la implementación parcial y la persistente resistencia por parte de las autoridades reflejan un patrón preocupante de negligencia y falta de responsabilidad por parte de algunos servidores públicos.