Franklin Barriga López
Desde 1985, Reporteros Sin Fronteras (RSF), organización no gubernamental y sin ánimo de lucro, que tiene su sede en París, viene defendiendo la libertad de prensa en el mundo y a los periodistas perseguidos por su actividad profesional.
En su informe correspondiente al año en curso, dio a conocer que, a nivel planetario, 533 periodistas se encuentran en prisión, 57 fueron asesinados, 65 secuestrados y 49 desaparecidos, cifras superiores a las de 2021, por ello declaró que esta peligrosa situación para los comunicadores es ascendente.
Emmanuel Colombié, director de esta entidad para América Latina, acaba de hacer declaraciones al respecto, en las que precisó que la lista de periodistas asesinados en México se presenta espeluznante y parece alargarse de manera inexorable, debido a que “ni el gobierno federal ni las autoridades locales se hacen cargo de la dimensión global del problema, ni tomen decisiones valientes”.
El mismo funcionario recomendó imponer urgentemente una refundación de los mecanismos de prevención de riesgos, de protección y de justicia, así como la instauración de una política integral y duradera, que permita garantizar la seguridad de los profesionales de la información.
Se ha definido a México como el país más mortífero del planeta para el ejercicio periodístico, por delante de otros que inclusive están en guerra, como Ucrania o Yemen. De acuerdo a la misma RSF, las principales causas se resumen en las investigaciones sobre cárteles, mafias, redes criminales y de corrupción.
Estos referentes deben alertar la conciencia ciudadana, especialmente en América Latina y el Caribe, debido al reconocido liderazgo que tiene el país azteca en la región, a fin de que se adopten medidas prontas y orientadas a la real defensa y protección a la prensa libre e independiente que es la madre de todas las libertades.