El algoritmo

Midjourney es una plataforma de inteligencia artificial que entrega imágenes al usuario a partir de una búsqueda por palabras. Es decir, cuando se ingresa el pedido, por ejemplo Quito con playa, en inglés, el robot de la plataforma, que está vinculada a otra: discord, genera una búsqueda y le ofrece al usuario resultados que no se los imaginaba.

Yo estoy como niño con juguete nuevo y, sí, estoy embobado y alienado, como cuando leo una novela de Pamuk o de Padura. Estoy completamente embebido y embobado en la plataforma y busco opciones ucrónicas para construir desde la ficción algo que solo un algoritmo puede entregar y que complementa a la creatividad del ser humano.

Si afinamos la búsqueda y entregamos más indicios para que la Inteligencia Artificial cree lo que le decimos, nos veremos más satisfechos aún.

Midjourney es una herramienta para quienes el trazo nos resulta difícil y no sabemos cómo dibujar ni pintar, pero también es una potencialidad para quienes nos gusta el arte. Le podemos pedir al algoritmo que nos busque o nos cree una imagen gótica, renacentista, impresionista, o de cualquier tendencia artística, de nuestra ciudad o de un personaje.

Podemos aportar con nuestras transformaciones y recircular las imágenes.

En esta plataforma hay una gran comunidad y grupos de usuarios que buscan compartir y construir universos narrativos, pues los temas y estilos son comunes y se comparten trucos y consejos para una búsqueda más refinada, y por ende, resultados alineados a lo que se quiere.

El logro de las imágenes son variadas, pero hay las que reproducen trazos y volúmenes como si fueran realmente pinturas: se puede apreciar el grosor de un pincel, la carga de óleo o pintura en el lienzo digital y hasta texturas que bien pueden haber sido hechas por una mano humana.

Muchos dirán que la mano del diablo está allí, y es cierto, pues lo desconocido o la técnica más refinada siempre han sido atribuidas al demonio, a algo que no es divino, y que puede torcer los renglones de dios, o de lo establecido.

El bendito o maldito algoritmo, la inteligencia que se desarrolla a partir del autoaprendizaje informático de la propia máquina está aquí para revolucionar el mercado del arte, para ser un elemento más de la narrativa con ilustraciones muy cercanas a lo que un autor ha pensado y requiere para completar su historia escrita.

Midjourney es una herramienta poderosa para expandir los relatos, para hacerlos multimedia sin necesidad de pago de derechos de autor… O tal vez esta es una herramienta que dejará a los ilustradores sin trabajo y con sus tarifas bajas que los dejará en la indigencia….

Esto no matará a eso, ya lo hemos visto en la historia de los medios.