Agenda 2030 (VI)

Pablo Granja

El tema de la igualdad tiene una importancia muy debatida y cuestionada al relacionarla con la búsqueda de “nivelar a las personas a través de la ley en lugar de hacerlas iguales frente a la ley”, como lo expresa Axel Kaiser en su libro ‘La tiranía de la igualdad’; en el que además expresa con precisión una conocida realidad: los gobiernos de izquierda se atribuyen a sí mismos la capacidad de resolver los problemas de la gente en lugar de crear las condiciones para que las personas lo hagan por sí mismas. Esto conduce irreversiblemente a anular la libertad y pérdida de la eficacia; y, sin duda, a que el poder lo ejerzan cúpulas tiránicas con el engaño de que los individuos serán “más libres por el hecho de hacerlos más iguales”. Considerando que el Foro de Davos anuncia que la eficiencia del Nuevo Orden Mundial cubrirá las necesidades de la población, con un salario único universal como forma de igualdad y una libertad camuflada, reafirma que los extremos de izquierda y derecha aspiran al control total de la sociedad y comparten la misma codicia de perpetuarse en el poder ejercido por una supremacía cupular. ¿O no es una coincidencia perversa alentar una sociedad ‘en que no tendrás nada y serás feliz’?

Algunos de los ODS ya están incorporados a nuestra cotidianidad; y seguirán avanzando con mucha efectividad usando instrumentos para un lavado cerebral a nivel global:

  • La información: controlada por gigantescos emporios transnacionales propietarios de cadenas informativas, periódicos, revistas, canales de entretenimiento, etc.
  • Alteración de los valores tradicionales que incorporan una aberrante ‘educación’ sexual desde la edad escolar. El eurodiputado holandés M. de Graaff ha denunciado que la Organización Mundial de la Salud ha publicado textos escolares en los que se ‘instruye’ acerca de la masturbación, el sexo oral, el tocamiento, la experiencia homosexual, etc., argumentando un supuesto ‘derecho a que los niños conozcan sus cuerpos y sus sensaciones’; publicaciones que son coincidentes con entidades como la Rutgers State University, como lo puede constatar cualquier curioso, ingresando a su página web y buscar los videos, que además tienen la facilidad de traducción a varios idiomas.
  • Promulgación de leyes que impulsen la protección de todas las versiones LGBTI+.
  • La infiltración del cristianismo reinterpretando los textos bíblicos, al punto de que se están imprimiendo Biblias gay con afirmaciones blasfemas inenarrables, aún para aquellos que no practicamos ninguna religión.

Es evidente que tanta ‘apertura’ sólo puede extenderse en el mundo occidental, aprovechando la tolerancia que las democracias garantizan; pero es impensable que ocurra en países islámicos que envían a prisión o castigan severamente a las mujeres que no llevan el hiyab – velo islámico – porque consideran que llevar el pelo descubierto es “una enfermedad mental contagiosa que causa promiscuidad sexual”. ¿Alguien se imagina ver un ‘desfile del orgullo gay’ en las calles de Teherán? El fanatismo religioso y cultural se mantiene intacto inclusive en la masiva migración que invade Europa, que se niega a acogerse a las leyes y costumbres de los países que los acogen.

Lo narrado en esta serie es un recorrido muy superficial sobre temas que a veces parecen ciencia ficción o adhesión a las teorías de la conspiración. La intención es motivar la discusión para lo cual hay muchísimo material para investigar que se encuentra en libros, foros, conferencias, entrevistas, artículos, ensayos; dirigidos por científicos, teólogos, académicos, filósofos, periodistas; que nos facilita a personas que por simple curiosidad incursionamos en asuntos que no por ser polémicos deben ser ignorados; más aún si afectan a los valores y cultura de Occidente, a la vez que le hace el juego a las intenciones totalitarias e intereses político – económicos que comparten tanto la ultraizquierda como la ultraderecha.

[email protected]