Amnistía ciega

Toda la energía de Pachakutik está puesta en lograr la amnistía para 269 personas que enfrentan distintos procesos; la quinta parte de ellos por hechos acaecidos en octubre de 2019 y el resto por una serie de acciones —desde ocupación de tierras hasta atentados contra mineras— que su dirigencia agrupa bajo la categoría de “defensa de la Naturaleza”. Para ello, requiere el voto favorable de dos tercios de la Asamblea Nacional, un consenso últimamente inusual.

 No se puede cobijar bajo el mismo manto a casos y delitos tan disímiles. El frenesí de octubre de 2019 dio lugar a actos que, en algunos casos, pueden perdonarse para contribuir, en palabras del propio presidente Guillermo Lasso, a la “pacificación” del país.

No obstante, hay episodios, como el incendio de la Contraloría General del Estado o la paralización de la producción petrolera, que por su gravedad y planeación no pueden quedar en la impunidad. Los acusados deben enfrentar a la Justicia; si no, se estaría mandando el mensaje de que habitamos una tierra de nadie en la que el delito es tolerado y bien visto.

Tampoco se puede negar las aspiraciones políticas de varios de los acusados, como Paola Pabón, Virgilio Hernández, Leonidas Iza o Jaime Vargas.

La política es, por naturaleza, transaccional; y el país tiene derecho a conocer las condiciones pactadas a cambio de estos votos, por las implicaciones que pueden llegar a tener.

Podrá pasar una amnistía, pero la sociedad sanará solo cuando se logre un compromiso de parte de los acusados -y los acusadores- de renunciar a la violencia; el recuerdo de octubre de 2019 debe ser el de un momento de locura que no debe repetirse jamás, no una plataforma propagandística de apología al extremismo.

FRASES DEL DÍA

«Hay un placer que nada puede igualar: la ilusión de tener un sentido.”

Amélie Nothomb (1967), escritora belga

«Los pastores serán brutales mientras las ovejas sean estúpidas.”

Luis de León (1527-1591), poeta español