Un luthier de gran formato

El músico estadounidense se destaca como un inventor de instrumentos para música arquitectónica.

Iván Mejía, EFE

La pasión de William Close es inventar instrumentos musicales inusuales que remiten a la escultura y la arquitectura, como un arpa con cuerdas de más de 290 metros de largo o una caja de resonancia con mil cuerdas en la que aun trabaja en su estudio californiano.

En 2014 verificadores del libro de registros mundiales Guinness reconocieron su ‘Arpa de la Tierra’ como “el instrumento de cuerdas más largas” del planeta (291,71 metros), después de que el artista diera un concierto de música “medioambiental” en Singapur, usando un edificio de 36 pisos como mástil del instrumento.

“Me encanta crear nuevas maneras de crear sonidos, de hacer música. Es una experiencia fascinante comenzar trabajando en el taller con una idea, construirla y luego hacerla sonar”, dice Close.

El inusual luthier, de 48 años, cuenta que nació “en un taxi” en las calles de Manhattan (Nueva York) y estudió música en la escuela de Artes de Chicago (1994).

En la universidad creó en 1992 el primer instrumento musical hecho “de un tubo de escape de un carro con cuerdas” y desde entonces ha creado un centenar de inventos.

Close comparte que en diversas casas de estudios aprendió “arquitectura, música, sonido y escultura” y con esa mezcla de conocimientos hoy crea “esculturas que hacen sonidos o música que es escultural o arquitectónica”.

Atmósfera

En Los Ángeles, donde tiene su estudio, el músico instala en el techo las largas cuerdas del ‘Arpa de la Tierra’ para ensayar.

En este taller de construcción y “laboratorio” alberga además una treintena de instrumentos de viento, cuerdas y percusión de su invención.

Allí trabaja hoy en la carpintería de las primeras piezas de la caja de resonancia de un millar de cuerdas, un instrumento pensado para ser tocado por varios músicos al mismo tiempo.

Para hacer sonar el ‘Arpa de la Tierra’, Close suele instalar de 24 a 48 cuerdas sobre su público en EE.UU., Europa y Asia.

Además ha llevado sus “armonías medioambientales” a México, Costa Rica, Bolivia, Perú y Brasil, donde la gente aprecia una inspiración que viene de cuando en su niñez viajaba en barcas de familiares marineros.

Sonido. La Cleve está en la caja de resonancia que construye. (EFE)
Sonido. La Cleve está en la caja de resonancia que construye. (EFE)

Mirada

“Navegar me parece algo muy musical”, dice Close, quien evoca el “sonido” y “ritmo del viento” y “las olas” golpeando la barca como un tambor. “Los botes de vela son esencialmente instrumentos musicales”, afirma.

El inventor explica que esa es la razón por la que en “las 20 versiones del ‘Arpa de la Tierra’ su base de madera “parece un barquito”. Un bote de velas “tiene un mástil hacia arriba, con cuerdas que van hasta la punta, bajo tensión, y el bote en sí mismo es como la cámara (de resonancia)”.

“Así que todos esos sonidos que ocurren arriba, en las amarras, son transferidos hacia abajo en el mismo bote”, revela.

En los conciertos, en una atmósfera cambiante de luces de colores el artista instala las cuerdas en los balcones de teatros, postes de auditorios o edificios y la gente queda bajo los filamentos como dentro de la barriga de un guitarrón.

“Sin amplificador eléctrico la cámara de resonancia suena como dos violoncelos”, dijo Close sobre su invento. “Y la manera en que hago sonar el instrumento es que me pongo guantes, aprieto las cuerdas y deslizo los dedos hacia abajo”, explicó.

Instrumento. Su ‘Arpa de la Tierra’ sobrepasa los 290 metros. (EFE)
Instrumento. Su ‘Arpa de la Tierra’ sobrepasa los 290 metros. (EFE)

Proyecto

William Close & The Earth Harp Collective es el nombre del grupo de siete músicos que se presenta con Close. En mayo de 2017, el inventor instaló los alambres de su arpa desde el techo del edificio Plaza California, en el centro de Los Ángeles.

“Tener acceso a la experiencia única de admirar la arquitectura de esos edificios” desde la perspectiva del techo hacia abajo, “eso es bello”, comenta Close, quien instala y afina las tensas cuerdas de tonos finos a graves.

“Espero haber construido el nuevo invento musical, el arpa de 1.000 cuerdas, en 2019”, adelanta Close. “Y queremos seguir convirtiendo reconocidos edificios del mundo en arpas para continuar el tour de los rascacielos”, concluye.

Presentaciones. Close ha visitado Centroamérica y el Cono Sur. (EFE)
Presentaciones. Close ha visitado Centroamérica y el Cono Sur. (EFE)

EL DATO

El músico quedó en tercer lugar, en 2012, en el concurso ‘América tiene talento’.

EL DATO

En 2016, fue invitado como artista en residencia por el Centro Kennedy para las Artes de Actuación en Washington.

Conjunto. Close junto a siete músicos conforma The Earth Harp Collective. (EFE)
Conjunto. Close junto a siete músicos conforma The Earth Harp Collective. (EFE)