El fenómeno de El Niño durará hasta 2024

TEMPORAL. Con el fenómeno de El Niño, Ecuador soportaría precipitaciones dos o tres veces más intensas.
TEMPORAL. Con el fenómeno de El Niño, Ecuador soportaría precipitaciones dos o tres veces más intensas.

Hay una gran posibilidad de que esta condición climática dure hasta los primeros meses de 2024, según una alerta emitida por el Estudio Nacional del Fenómeno El Niño.

El fenómeno de El Niño podría extenderse hasta los primeros meses de 2024, así lo indica el Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (ERFEN). La probabilidad de esta extensión es del 77%.

Esta es una de las causas para que las lluvias continúen y sean cada vez más fuertes, pese a la cercanía del verano. “La magnitud más probable del evento para los últimos meses de 2023 estaría entre fuerte y moderada; mientras que, para invierno moderada. Finalmente, para el verano de 2024 la magnitud más probable estaría entre moderada y débil”, agrega el ERFEN.

En el caso de Ecuador, que por ubicarse en la región del Pacífico Central es propenso a este fenómeno natural, según los datos de ERFEN, es muy probable que los estragos del fenómeno inicien desde agosto de 2023.

 ¿Ecuador está preparado?

En la costa ecuatoriana, el invierno ha dejado – en lo que va del año– casi 100.000 personas afectadas, de acuerdo con las estadísticas que hace diariamente la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR).

En el país, 191 de los 221 cantones han sido golpeados por casi 2.203 eventos peligrosos causados por la intensidad de las lluvias. Además, cerca de 76 kilómetros de vías registran daños.

Josué Alvarado, máster en gestión de riesgos, señala que han pasado 25 años desde que El Niño dejó grandes pérdidas humanas y de bienes en el país.

Alvarado cita existe un informe presentado por Corporación Andina de Fomento (CAF), en el año 2000, y que existe documentación que muestra que el fenómeno dejó altos trastornos en los patrones climáticos. “Si bien el clima no es estático, ya se puede trabajar en proyecciones, tomando en cuenta los efectos pasados”, dice.

Ya hace más de dos décadas –según Alvarado– los meteorólogos pudieron prever detalles de la aparición de este fenómeno. “Trabajar en las proyecciones y planes emergentes, permite que con tiempo, por ejemplo, los agricultores y pescadores estén listos para sus efectos”.

En 1997, en Ecuador, el fenómeno de El Niño dejó 286 víctimas mortales, 162 heridos, 36 desaparecidos, y más de 29.000 personas evacuadas, según recoge un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

En 2016 fue la última vez que se formó El Niño, desde entonces, ha existido un aumento de temperaturas globales, por eso, las instituciones que hacen seguimiento de estos fenómenos, a escala mundial, consideran que este 2023 volverá y que será potente.

Lo que contribuye a que esto pase es el gran calentamiento de los océanos, lo que en conjunto podría llevar “la temperatura global a niveles nunca antes vistos entre 2023 y 2024”, señala Alvarado. (AVV)

Es importante siempre tener una mochila de emergencia.
El Niño suele llevar a una temporada de huracanes más activa en el Pacífico oriental y central.
 La Comisión Multisectorial del ENFEN mantiene el estado de alerta ante el fenómeno de El Niño Costero.