Ecuador y el FMI llegan a un acuerdo técnico para un programa de financiamiento por $4.000 millones

HECHO. El pasado 20 de abril, el ministro de Economía, Juan Carlos Vega Malo, se reunió con Kristalina Georgieva, directora del FMI.

Este acuerdo técnico deberá ser aprobado por el directorio del FMI. Todavía no se conocen compromisos que habría puesto sobre la mesa Ecuador para recibir $4.000 millones de financiamiento. El programa que firmará Ecuador será un Servicio Ampliado del Fondo (SAF) con una duración de 4 años. Entérese en qué consiste el SAF y la carta de intención que incluye.

Este 25 de abril de 2024, el Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció que ha llegado a un acuerdo técnico con Ecuador sobre un programa de financiamiento con un desembolso total de $4.000 millones.

El programa sería un Servicio Ampliado del Fondo (SAF), con una duración de 48 meses o 4 años. Todavía no se saben los detalles ni los compromisos que Ecuador habría puesto sobre la mesa para acceder a esos recursos.

“Me complace anunciar que el personal del FMI y las autoridades ecuatorianas han llegado a un acuerdo en apoyo al plan de política económica de Ecuador. En medio de un panorama macroeconómico desafiante, nuestro objetivo ha sido y sigue siendo apoyar los esfuerzos de las autoridades para mejorar los niveles de vida de todos los ecuatorianos, con un enfoque en proteger a los más vulnerables y promover el crecimiento sostenible”, dijo Varapat Chensavasdijai, jefe de la misión del FMI en Ecuador.

Según Chensavasdijai, las autoridades ecuatorianas elaboraron un plan sólido y han comenzado a tomar importantes medidas políticas para abordar la situación fiscal y de liquidez. Esto en relación a temas como la subida del IVA al 15%.

“El personal técnico del FMI acoge con agrado los esfuerzos de reforma realizados por las autoridades para ayudar a fortalecer la sostenibilidad fiscal, salvaguardar la estabilidad macroeconómica y fomentar una economía más fuerte e inclusiva”, agregó el jefe de la misión del FMI en Ecuador.

El acuerdo técnico deberá ser aprobado en los próximos días por el directorio del FMI para que entre oficialmente en vigor.

El exministro de Economía, Mauricio Pozo, a través de su cuenta de X, dijo: «Excelente noticia el acuerdo con el FMI por $4.000 millones a 4 años plazo. Va a ser de mucha ayuda para la crisis fiscal. Demandará continuidad y perseverancia de este y el siguiente gobierno. Habrá que esperar conocer las metas y las reformas acordadas. Buena noticia».

El actual ministro de Economía , Juan Carlos Vega, señaló que, de darse la aprobación del Directorio del FMI, el Ecuador accederá a recursos frescos que ayudarán a sostener la seguridad ciudadana, impulsar obra pública, garantizar la protección social y direccionar al país por la senda de un crecimiento económico inclusivo.

De acuerdo con el ministerio de Economía, el acuerdo técnico se logró luego de varias reuniones de trabajo entre las autoridades ecuatorianas y el personal del FMI, en donde se «expusieron los objetivos del Ecuador, que se relacionan con un manejo eficiente y transparente de los recursos públicos, la lucha contra la inseguridad y la corrupción, y la implementación de políticas públicas que promuevan la estabilidad económica y social».

¿Qué es un Servicio Ampliado del Fondo (SAF)?

El Servicio Ampliado suele aprobarse por períodos de tres años, pero también pueden aprobarse por períodos de hasta cuatro años, a fin de implementar reformas estructurales profundas y duraderas.

Los préstamos recibidos deberán pagarse en un plazo de entre 4 años y medio y 10 años, con pagos en 12 cuotas semestrales iguales.

Cuando se firma un acuerdo de Servicio Ampliado, el país beneficiario (en este caso Ecuador) debe presentar una carta de intención al FMI.

Una carta de intención es un documento formal en el que un país se compromete a seguir ciertas políticas económicas y financieras acordadas con el FMI.

Al contario de la creencia popular, la carta de intención elaborada y propuesta por las autoridades del país que busca financiamiento; y no es una imposición del FMI.

Entre las principales medidas que suelen incluir las cartas de intención están las siguientes:

–Reducción de subsidios: El país se compromete a acelerar la reducción de los subsidios a la energía y el transporte. Los precios pagados por los consumidores para estos servicios aumentarán gradualmente.

En este punto, el Gobierno de Daniel Noboa ha anunciado que una focalización de subsidio a los combustibles, enfocado en la gasolina extra y la Ecopaís, se concretaría en el segundo semestre de 2024.

Sin embargo, todavía no existe un plan para concretar esto. En la negociación con el FMI, sí se debería presentar ese plan con metas y fechas de implementación claras

–Empleo público: Se evitará renovar cargos en puestos no prioritarios y se congelarán las nuevas contrataciones en el gobierno nacional durante dos años. Además, se eliminarán las posiciones redundantes para reducir el gasto en personal.

Estos son dos de las metas clásicas en el tema de control del gasto público, sobre todo en temas de nómina. Sin embargo, en el Presupuesto de 2024, que el Gobierno envió recientemente en la Asamblea, no existe cambios estructurales en términos de nómina ni de subsidios.

Podría ser que se negocie un ajuste fiscal progresivo desde 2025, probablemente luego de que se concrete la reelección de Noboa para cuatro años más.

–Obra pública: Se pospondrán proyectos de obra pública no esenciales para dinamizar la competitividad. También se reducirán las transferencias asociadas al déficit operativo de empresas públicas no relacionadas con las tarifas de servicios públicos.

El problema de las empresas públicas es complejo. Siete cerraron con pérdidas en 2023; pero el Gobierno no ha presentado un plan para reestructurar el gasto.

–Reforma tributaria: Normalmente, la reforma tributaria que impulse el FMI tiene dos componentes. En primer lugar, un aumento permanente en los ingresos. Esto ya estaría cumplido, aún antes de la firma del acuerdo, con la subida del IVA hasta el 15%. (JS)

 

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