Paco Moncayo Gallegos
Nuestra Capital es una de las ciudades más hermosas y reconocidas en América y el mundo. Su verde y caprichosa geografía, su espléndido patrimonio arquitectónico, sus extraordinarios bienes culturales, su historia rica en páginas de sacrificio heroico en defensa de las libertades, la han colocado en esa destacada situación.
La milenaria cultura indígena y el espléndido arte español del ‘Siglo de Oro’, sumados a las ricas formas y técnicas mudéjares y mozárabes, permitieron el surgimiento de la famosa ‘Escuela de Arte Quiteño’, altamente valorada en América y Europa. De ahí deriva el que haya sido conocida como la ‘Florencia de América’ y como ‘Relicario de Arte en América’.
Desde su suelo partió en el siglo XVI la famosa expedición comandada por Gonzalo Pizarro que culminó con el descubrimiento por uno de sus tenientes, Francisco de Orellana, del ‘Río de las Amazonas’ conocido, también, desde entonces, como el ‘Río de Quito’.
El temperamento rebelde y altivo de su pueblo la llevó a escribir páginas sobresalientes en la historia americana: organizó su gobierno autónomo el 10 de Agosto de 1809, fue sometida a martirio el 2 de agosto de 1810, proclamó la Constitución del Estado de Quito en 1812 y, el 24 de Mayo de 1822, con la victoriosa Batalla de Pichincha, culminó este largo y sacrificado camino de su independencia. Refiriéndose a la masacre del 2 de agosto, Bolívar escribió: “En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera despedazó los derechos de la naturaleza y las naciones”, para justificar su declaratoria de guerra a muerte. Posteriormente, los patriotas chilenos la bautizaron como ‘Luz de América’.
En tiempos recientes, Quito fue la primera ciudad en presentar el Informe de los Objetivos del Milenio y también en declarar en París su Estrategia para enfrentar al Cambio Climático. Su Centro Histórico ha sido reconocido como el mayor y mejor conservado de América.
Esa es nuestra ciudad que, en este cumpleaños, se siente atribulada por las agresiones sufridas y por las calamidades de la pobreza el desempleo y la inseguridad; pero Quito no se rinde, nunca se ha rendido ante amenazas o dificultades y con la fuerza que imprime su heroica historia, volverá al sitial que le corresponde.
Paco Moncayo Gallegos
Nuestra Capital es una de las ciudades más hermosas y reconocidas en América y el mundo. Su verde y caprichosa geografía, su espléndido patrimonio arquitectónico, sus extraordinarios bienes culturales, su historia rica en páginas de sacrificio heroico en defensa de las libertades, la han colocado en esa destacada situación.
La milenaria cultura indígena y el espléndido arte español del ‘Siglo de Oro’, sumados a las ricas formas y técnicas mudéjares y mozárabes, permitieron el surgimiento de la famosa ‘Escuela de Arte Quiteño’, altamente valorada en América y Europa. De ahí deriva el que haya sido conocida como la ‘Florencia de América’ y como ‘Relicario de Arte en América’.
Desde su suelo partió en el siglo XVI la famosa expedición comandada por Gonzalo Pizarro que culminó con el descubrimiento por uno de sus tenientes, Francisco de Orellana, del ‘Río de las Amazonas’ conocido, también, desde entonces, como el ‘Río de Quito’.
El temperamento rebelde y altivo de su pueblo la llevó a escribir páginas sobresalientes en la historia americana: organizó su gobierno autónomo el 10 de Agosto de 1809, fue sometida a martirio el 2 de agosto de 1810, proclamó la Constitución del Estado de Quito en 1812 y, el 24 de Mayo de 1822, con la victoriosa Batalla de Pichincha, culminó este largo y sacrificado camino de su independencia. Refiriéndose a la masacre del 2 de agosto, Bolívar escribió: “En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera despedazó los derechos de la naturaleza y las naciones”, para justificar su declaratoria de guerra a muerte. Posteriormente, los patriotas chilenos la bautizaron como ‘Luz de América’.
En tiempos recientes, Quito fue la primera ciudad en presentar el Informe de los Objetivos del Milenio y también en declarar en París su Estrategia para enfrentar al Cambio Climático. Su Centro Histórico ha sido reconocido como el mayor y mejor conservado de América.
Esa es nuestra ciudad que, en este cumpleaños, se siente atribulada por las agresiones sufridas y por las calamidades de la pobreza el desempleo y la inseguridad; pero Quito no se rinde, nunca se ha rendido ante amenazas o dificultades y con la fuerza que imprime su heroica historia, volverá al sitial que le corresponde.
Paco Moncayo Gallegos
Nuestra Capital es una de las ciudades más hermosas y reconocidas en América y el mundo. Su verde y caprichosa geografía, su espléndido patrimonio arquitectónico, sus extraordinarios bienes culturales, su historia rica en páginas de sacrificio heroico en defensa de las libertades, la han colocado en esa destacada situación.
La milenaria cultura indígena y el espléndido arte español del ‘Siglo de Oro’, sumados a las ricas formas y técnicas mudéjares y mozárabes, permitieron el surgimiento de la famosa ‘Escuela de Arte Quiteño’, altamente valorada en América y Europa. De ahí deriva el que haya sido conocida como la ‘Florencia de América’ y como ‘Relicario de Arte en América’.
Desde su suelo partió en el siglo XVI la famosa expedición comandada por Gonzalo Pizarro que culminó con el descubrimiento por uno de sus tenientes, Francisco de Orellana, del ‘Río de las Amazonas’ conocido, también, desde entonces, como el ‘Río de Quito’.
El temperamento rebelde y altivo de su pueblo la llevó a escribir páginas sobresalientes en la historia americana: organizó su gobierno autónomo el 10 de Agosto de 1809, fue sometida a martirio el 2 de agosto de 1810, proclamó la Constitución del Estado de Quito en 1812 y, el 24 de Mayo de 1822, con la victoriosa Batalla de Pichincha, culminó este largo y sacrificado camino de su independencia. Refiriéndose a la masacre del 2 de agosto, Bolívar escribió: “En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera despedazó los derechos de la naturaleza y las naciones”, para justificar su declaratoria de guerra a muerte. Posteriormente, los patriotas chilenos la bautizaron como ‘Luz de América’.
En tiempos recientes, Quito fue la primera ciudad en presentar el Informe de los Objetivos del Milenio y también en declarar en París su Estrategia para enfrentar al Cambio Climático. Su Centro Histórico ha sido reconocido como el mayor y mejor conservado de América.
Esa es nuestra ciudad que, en este cumpleaños, se siente atribulada por las agresiones sufridas y por las calamidades de la pobreza el desempleo y la inseguridad; pero Quito no se rinde, nunca se ha rendido ante amenazas o dificultades y con la fuerza que imprime su heroica historia, volverá al sitial que le corresponde.
Paco Moncayo Gallegos
Nuestra Capital es una de las ciudades más hermosas y reconocidas en América y el mundo. Su verde y caprichosa geografía, su espléndido patrimonio arquitectónico, sus extraordinarios bienes culturales, su historia rica en páginas de sacrificio heroico en defensa de las libertades, la han colocado en esa destacada situación.
La milenaria cultura indígena y el espléndido arte español del ‘Siglo de Oro’, sumados a las ricas formas y técnicas mudéjares y mozárabes, permitieron el surgimiento de la famosa ‘Escuela de Arte Quiteño’, altamente valorada en América y Europa. De ahí deriva el que haya sido conocida como la ‘Florencia de América’ y como ‘Relicario de Arte en América’.
Desde su suelo partió en el siglo XVI la famosa expedición comandada por Gonzalo Pizarro que culminó con el descubrimiento por uno de sus tenientes, Francisco de Orellana, del ‘Río de las Amazonas’ conocido, también, desde entonces, como el ‘Río de Quito’.
El temperamento rebelde y altivo de su pueblo la llevó a escribir páginas sobresalientes en la historia americana: organizó su gobierno autónomo el 10 de Agosto de 1809, fue sometida a martirio el 2 de agosto de 1810, proclamó la Constitución del Estado de Quito en 1812 y, el 24 de Mayo de 1822, con la victoriosa Batalla de Pichincha, culminó este largo y sacrificado camino de su independencia. Refiriéndose a la masacre del 2 de agosto, Bolívar escribió: “En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera despedazó los derechos de la naturaleza y las naciones”, para justificar su declaratoria de guerra a muerte. Posteriormente, los patriotas chilenos la bautizaron como ‘Luz de América’.
En tiempos recientes, Quito fue la primera ciudad en presentar el Informe de los Objetivos del Milenio y también en declarar en París su Estrategia para enfrentar al Cambio Climático. Su Centro Histórico ha sido reconocido como el mayor y mejor conservado de América.
Esa es nuestra ciudad que, en este cumpleaños, se siente atribulada por las agresiones sufridas y por las calamidades de la pobreza el desempleo y la inseguridad; pero Quito no se rinde, nunca se ha rendido ante amenazas o dificultades y con la fuerza que imprime su heroica historia, volverá al sitial que le corresponde.