Antes de que se formalizara, la ruptura del movimiento Alianza PAIS era un hecho. Su llamado líder histórico la puso en blanco y negro en Babahoyo. Sazonó el acto con una retahíla de descalificaciones a quienes, según él, le ‘robaron’ su partido, como si se tratara de un mañoso encuentro de fútbol callejero. Como siempre, en su pronunciamiento ante los medios fue fiel a idea de que, sin él, Ecuador no tiene futuro.
El divorcio entre correístas y morenistas no deja de llamar la atención, pues es consecuente con una manera torpe y ramplona de hacer política que las dos partes siempre dijeron que no volvería a repetirse. En el drama de la ruptura representa, sin embargo, la más amarga de las derrotas políticas que ha debido afrontar desde que dejó el siempre ambicionado Palacio de Carondelet. El ‘líder histórico’, además de tener a su exvicepresidente y a varios de sus más íntimos colaboradores tras las rejas o envueltos en procesos judiciales, se ve en la tarea de organizar otro partido político desde la base y de paso armar otro buró político. Quizás cuente, además, los ‘ahorros’ millonarios logrados en la ‘década ganada’ por algunos de sus adláteres visibles e invisibles.
Además de la atomización de su movimiento y el destape de corrupción de varios cabecillas de su régimen, el ‘líder histórico’ podría tener que beber otro trago amargo, si el próximo 4 de febrero todo le sale al revés de lo que procura alcanzar en este su segundo viaje. Quizás las puertas de Carondelet no vuelvan a abrírsele y hasta tenga que desmontar su museo y llevárselo a Bélgica.
Sin risa y sin llanto la vida no tendría sentido”. Ramón Sender Escritor español (1901-1982)
Lo urgente es sinónimo de efímero y lo efímero jamás es importante”. John le Carré Escritor inglés (19319)