A los nueve años de edad un niño difícilmente puede resolver un ejercicio matemático de ‘factoreo’, realizar un voluminoso ensayo o romper el récord en los 100 metro planos. Sí estará en capacidad de sumar, restar, multiplicar y dividir. Su motricidad fina y gruesa han alcanzado una serie de habilidades. Podrá correr, saltar y nadar sin problemas.
¿Qué ha sucedido en el ámbito cultural en estos años? Es prudente que la ciudadanía realice una evaluación del Ministerio de Cultura y Patrimonio, que va para su década de creación. Hay que analizar, para empezar, el tratamiento del proyecto de Ley Orgánica de Culturas.
Es cierto que se creó un ministerio y se propuso una ley que, sin duda, son hechos históricos. La cartera ha contado hasta el momento con nueve ministros –considerando al actual-; es decir, hay una media de rotación de ministro por año, lo que no ha permitido que esta institución ‘camine’ como debe.
El Ministerio de Cultura y Patrimonio parecería que sigue en pañales y que gatea. El tratamiento del Proyecto de Ley de Culturas reafirma la lentitud del avance en este sector. El 18 de septiembre de 2009 empezó su camino sin tener mayor prioridad e importancia: se encuentra estancada y parecería que el tiempo se le acorta.
El presidente Correa ha repetido la gran deuda que se tiene a la cultura, y parece que la crisis no cesará sobre ella. Lastimosamente, este sector ha sido el más olvidado, por lo que más que hacerle historia, habría que hacerle justicia. El olvido, ¿ha sido por descuido, por ignorancia o por desidia? El tiempo nos desvelará la verdad.
«Si bien la
inteligencia tiene un
límite, la tontería y la malicia no
tienen fondo visible o alcanzable”.
Ana María Matute
Escritora española (1926-2014)
«La burla
significa en muchos casos falta de ingenio”.
Jean de la Bruyere
Escritor francés (1645-1696)