Consulta: Ingenuidad o solución

Jaime Vintimilla

Las preguntas que se encuentran en la fase de calificación o admisibilidad ante la Corte Constitucional nos muestran muchas debilidades que aquejan a la sociedad ecuatoriana que no atina a construir consensos y más bien se distrae y hasta se ensalza con cotilleos y preocupaciones baladíes como la lucha política que aparentemente divide al movimiento político que ha gobernado el país por más de una década.

A pesar de la ambigüedad de algunas preguntas y más allá de la necesidad de que gane abrumadoramente el sí, al parecer envuelve al país una encrucijada peligrosa que bien podría terminar de hundir a la realidad nacional sumiéndola en una crisis económica, política y social que nos conduciría a situaciones similares de países como Grecia o Venezuela.

Este sesgo pesimista se relaciona con la presencia de instituciones sólidas, transparentes e independientes que no giren en derredor de los vaivenes coyunturales, olvidando su misión y objetivo de equilibrar y controlar el poder.

Por otra parte, el diálogo no puede ser una mera formalidad, pues debe orientarse a generar verdaderos compromisos y acuerdos duraderos que permitan la construcción de un país donde se advierta una plena cooperación y coordinación entre lo público y lo privado. Urge olvidar por completo las fachadas ideológicas que nos alejan de los intereses y las necesidades comunes. Solamente así se podrá acceder a un proyecto nacional que no se centre en los maniqueísmos o intereses, ya sean sectoriales, ya sean personales.

Por estas razones, la consulta debe llevarse a cabo lo más pronto posible, ya que las prácticas de la distracción amenazan y juegan un papel crucial; por ello, si transcurriere mucho tiempo, la estrategia de los concentradores de poder habrá triunfado dejando de lado el inicio de las transformaciones.

Infortunadamente resulta sumamente difícil comprender el inverosímil hecho de que personas del mismo equipo político pueden cambiar de opinión y actuar distinto. Cosas de ingenuos o de necios.

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