Las familias que viven en zonas de riesgo están buscando cuartos y departamentos.
Hasta el barrio Albornoz, en Rumiñahui, han llegado varios habitantes del barrio Selva Alegre, el cual está catalogado como una zona de riesgo ante la posible erupción del volcán Cotopaxi.
Estas personas van en busca de inmuebles de alquiler. Dicen que su prioridad es contar con un sitio para guardar las pertenencias de valor. En algunos casos pagan hasta 100 dólares mensuales por un cuarto, los arriendos de departamentos subieron de 150 a 250 dólares.
Estefanía Cruz y sus familiares, entre los que se incluyen tres personas de la tercera edad, dejaron Selva Alegre hace un mes. Lo hicieron luego de que el Cotopaxi expulsara las primeras columnas de vapor y ceniza el 19 de agosto. Ellos tuvieron suerte porque fueron a ocupar la vivienda de otro pariente en el barrio Albornoz.
La familia Cruz Salió de la zona de riesgo porque en uno de los simulacros que se realizó tardaron más tiempo de lo previsto en evacuar la casa. Estefanía dijo que ahora está más tranquila teniendo a sus abuelitos seguros. “A ellos no se les puede obligar a correr”.
Otros casos
Al igual que los Cruz hay otras familias que han salido de la zonas de riesgo para refugiarse en casas de amigos o conocidos. Los que salieron en busca de las piezas o departamentos de arriendo se toparon con que los precios subieron. Por una vivienda de tres dormitorios, con sala comedor y dos baños les piden hasta 250 dólares, cuando antes se pedía un promedio de 150 dólares por un inmueble así.
Adriana Gallardo, quien tiene un hijo y dos hermanos que habitan cerca del río Santa Clara, les ha abierto las puertas de su casa para acogerlos, pero confirma que hay otras familias que están pagando mucho no tienen a nadie en Albornoz.
Ernesto Ibujes, comentó que en la iglesia y La Casa Barrial de Albornoz tienen previsto acoger a unas 200 personas, que no pueden más. Su pedido a la gente del sector es que no se exagere en el costo que piden por el alquiler de una vivienda.
Otros sectores donde están arrendando pequeños departamentos a las familias en riesgo son los barrios Terán Varea y San Vicente.
Un similar ambiente se vive en Fajardo, hasta donde acuden familias que actualmente habitan en San Rafael o El Triángulo.
Rosa Guamán, moradora de Fajardo, comentó que también hay personas que están aumentando un piso en sus casas para acoger a los familiares y otros que están construyendo pequeñas mediaguas en los patios con la finalidad de ayudarlos. (PSD)
