Ibarra. Como ‘Costeñita’ bautizaron a la perrita que Pablo Guzmán rescató de Muisne. Tiene alrededor de ocho años y presenta un caso grave de tumor venéreo transmisible (TVT), una enfermedad crónica que al no ser tratada puede ocasionar la muerte del animal y que representa un sufrimiento debido al dolor y sangrado constante que presenta quien lo posee.
Se desconoce si la perrita tenía un hogar, debido a que es uno de los casos más graves de esta enfermedad, según indicaron las activistas que dieron a conocer esta historia. En el sitio en donde fue rescatada las personas sugerían matar al animal de forma cruel debido al problema de salud que presenta, según indicaron.
Ante la realidad, el voluntario mencionado decidió rescatarla para darle una oportunidad de tener días mejores. Ya en Ibarra, se llevó a ‘Costeñita’ a una clínica veterinaria para que se evalúe y se determine qué enfermedad poseía. “Fue doloroso ver el estado de este animalito y el sufrimiento por el que debe estar pasando, no se sabe desde cuando”, añadió una de las activistas.
El viernes pasado fue atendida y diagnosticada con TVT. Esta enfermedad se genera por lo general en perros callejeros y es contagiosa entre los animales, más no representa peligro para el ser humano, según se indicó. “Sin embargo, representa una enfermedad crónica y muy dolorosa que requiere de un tratamiento y cuidados específicos hacia el animal”.
El TVT tiene cura, pero el tratamiento es costoso ya que consiste en sesiones de quimioterapia. Para el caso de esta perrita, indicaron que se requiere por lo menos cuatro sesiones, cada una con un costo de 35 dólares.
Pedido
Las activistas del grupo “La Voz Animal” solicitaron la ayuda de la ciudadanía ante este caso. El principal objetivo de este grupo es promover la consciencia sobre la tenencia responsable de animales y generar sensibilidad en la comunidad referente al respeto de la vida de un animal.
“La ayuda que se solicita es el apadrinamiento de la perrita. Las personas que deseen apoyar con las sesiones de quimioterapia pueden acudir a la Clínica Veterinaria Zúñiga, ubicada en la avenida Atahualpa junto a la Supe Parrillada. Ahí está abierto el caso de ‘Costeñita’”. Asimismo, se busca un hogar permanente que acoja a la perrita luego de su recuperación para brindarle una segunda oportunidad de vida. (CFDA)
DATO
La perra ya tuvo la primera quimioterapia, pero se requiere ayuda para que continúe con el tratamiento.