Uno de los sectores que nunca estuvo preparado para una pandemia es el educativo, donde miles de jóvenes y maestros han tenido que cambiar sus rutinas diarias y aulas de clases por horas frente a un computador.
Desde que se conoció el primer caso confirmado de covid en el Ecuador, una de las principales preocupaciones se centró en la asistencia a los establecimientos educativos.
Autoridades garantizaban el suministro de gel antiséptico, alcohol y jabón, sin embargo, cuatro días después de estos anuncios los ofrecimientos no se concretaban y los niños de varios establecimientos fiscales se quedaban sin productos de aseo para combatir el virus.
La Hora en su portada del 4 de marzo ya evidenció la situación a la que varios estudiantes y maestros se enfrentaban. Según padres de familia en varias escuelas no se dotó de estos productos por lo que se sentían preocupados. “Nosotros podríamos enviar gel o alcohol, pero tampoco es que se está vendiendo”, comentó Alex Freire, padre de familia. Miriam, estudiante de bachillerato, aseguró que en su colegió no cuentan con ninguno de estos productos, pero ella lleva en su maleta.
En rueda de prensa del viernes 13 de marzo se anunció la suspensión de clases y el inicio del trabajo a través de una plataforma para maestros y estudiantes del sistema fiscal. Para el martes 17 de marzo ya se comenzó a evidenciar la problemática a la cual se enfrentaban los padres de familia, uno de estos casos es el de Martha Labre que no cuenta con un computador para acceder a las plataformas de educación.
“Desde que dijeron que ya no hay clases me toca estar preguntando a los compañeros de mi hijo para ver qué hay de novedades, hoy me dijeron que ya hay una plataforma, pero en realidad no sé qué hacer”, dijo. Según la ciudadana este tipo de soluciones está pensada solo para un sector económico, pero para la clase media baja no se da respuestas reales.
Mientras tanto la realidad de los planteles particulares resultaba diferente, incluso algunos tenían su propia plataforma para tareas y actividades. “A mi hijo le han enviado como 20 operaciones matemáticas para entregar mañana, si envían todos los días así considero que es demasiado, pues nuestros hijos no son los culpables de esta situación”, aseguró Odalis Villacrés, madre de familia.
Los inconvenientes aparecían todos los días, pues los centros educativos tuvieron que adaptarse a la fuerza a un sistema virtual de enseñanza y utilizar hasta los sistemas de mensajería para tratar de coordinar las actividades entre docentes, padres y estudiantes.
EL DATO
En Tungurahua son 4 mil 347 profesores que deberán volver a las aulas desde el próximo mes, mientras que 289 que pertenecen a los grupos vulnerables continuarán con el teletrabajo.
Pensiones
Otro de los problemas a los que los padres de familia se enfrentaban es al pago de pensiones que seguía corriendo cada mes y a lo cual muchos pedían que se redujeran los valores a pagar. La ministra de Educación, Monserrat Creamer, solicitó a las instituciones educativas que lleguen a un acuerdo con los padres de familia.
Según los representantes de los estudiantes a pesar de que a nivel nacional se manifestó que se iba a ayudar a los padres de familia en el tema de pensiones para que se realice un descuento debido a la emergencia, esto no se cumplió y lo que se estaba haciendo por varias instituciones fue desarrollar estrategias para el cobro.
Jenny es madre de familia de dos niñas que son parte de una institución educativa particular en Ambato, para ella la situación es complicada, ya que desde que se suspendieron las labores ella no pudo retornar a su trabajo, lo cual representa un problema a la hora de generar recursos para su hogar.
“A través de mensajes de texto o incluso en el grupo de WhatsApp se exige el pago de las pensiones, pero ni siquiera se tiene para el sustento diario, peor para eso”, confesó al tiempo de indicar que en esta institución educativa no se hizo ningún descuento.
Situación similar vive Rolando, padre de familia, quien indicó que incluso en la escuela de su hijo han buscado estrategias como el cobro en casa para que no exista un pretexto del no pago de la pensión. Según este padre de familia en la escuela de su hijo se ha hecho un descuento de 30 dólares, es decir por el no pago de la colación, pero aún debe pagar 130 dólares.
TOME NOTA
Varios padres de familia denunciaron que para este nuevo año electivo las instituciones educativas estaban solicitando aportes para arreglar las aulas.