Ola Bini, a través de su traductor, siguió muy atento la extensa audiencia de hábeas corpus en el tercer piso de la Corte Provincial de Pichincha, a partir de las 16:00. Después de 70 días de permanecer detenido, el fallo se inclinó a su favor. No se alegró tanto, solo dijo que se mantiene optimista y que espera “ser liberado pronto de esta injusticia”.
El desarrollador de software se mantiene detenido desde el 11 de abril, en el aeropuerto Mariscal Sucre. Sus abogados, Mario Melo e Iván Escandón, además del amicus curiae de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh), presentado por Alejandro Baño, en una hora y media fundamentaron los alegatos en torno a lo que ellos consideraron una detención ilegal de Bini.
La solicitud de habeas corpus se realizó en contra de la jueza Yadira Proaño quien había negado una caución (fianza). Los jueces Patricio Vaca y Henry Caliz, de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha, deliberaron por más de una hora. Finalmente, leyeron la resolución, que produjo un murmullo de felicidad en la sala y batucada en los bajos del edificio. Desde temprano, unas 20 personas vinculadas con los Derechos Humanos, se instalaron en un plantón con carteles, cánticos y tambres.
Dudas sobre el delito
El experto (36 años), que tendría nexos con Julian Assange, era investigado por supuesta vulneración de sistemas informáticos en Ecuador. Sus abogados, que incluso presentaron testimonios del “maltrato e incomunicación” del detenido.
El argumento utilizado por la defensa fue que hubo falta al debido proceso, violación a la seguridad jurídica, carencia de motivación e irrespeto a la presunción de inocencia. “Hubo una vulneración al derecho a la libertad”, dijo el juez ponente, Patricio Vaca, al concluir la audiencia en la Corte Provincial de Pichincha, donde tres jueces decidieron, por dos votos a favor y uno en contra, conceder la libertad a Bini “inmediatamente”.
De nacionalidad sueca, el informático fue detenido el mismo día en que el Gobierno de Lenín Moreno puso fin al prolongado asilo a Assange en su embajada en Londres y es sospechoso de participar en una supuesta red de espionaje contra el Estado ecuatoriano.
Con esta diligencia, el procesado saldrá en libertad del Cenntro de Detención de El Inca, en las próximas horas. Deberá presentarse periodicamente ante un juez y además se dispuso que no podrá salir del país.
Según uno de sus abogados, Iván Escandón, nunca se le informó cuál es el delito cierto, puntual y concreto ni se ha identificado el hecho que ha cometido en contra del Estado. (SE)