Redacción COTOPAXI
A las 11:00 llegó a la ciudad el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, quien manifestó su interés de recorrer las ciudades del país para compartir sus experiencias en la administración local, por más de 18 años.
En su visita protocolar al alcalde de Latacunga, Patricio Sánchez, el Alcalde de Guayaquil informó que una vez concluido su mandato, en mayo próximo, tendrá tiempo y quiere utilizarlo para recorrer el país y compartir sus experiencias, buenas y malas al frente de la administración municipal a los alcaldes y prefectos.
En su discurso destacó que hay dos luchas que debe enfrentar el pueblo con los alcaldes y prefectos a la cabeza, porque quienes deben hacerlo no lo hacen, son: la inseguridad y la generación de empleo.
En la inseguridad dijo que el garantismo en el país ha servido para proteger los derechos de los delincuentes y no los de la sociedad.
“La comunidad no tiene por qué soportar los efectos de la delincuencia y los asambleístas y el Gobierno deben entender que el pueblo del Ecuador quiere a los asesinos, secuestradores y violadores en la cárcel y si no lo entienden deberá realizarse una consulta popular porque el pueblo sabe exactamente lo que quiere”, dijo.
Añadió que tampoco habrá seguridad si no se derogan las leyes prodelincuenciales, que permiten a una persona que tiene 5 o 6 juicios por violación, seguir libre porque el proceso no ha terminado y cuando es apresado otorgarle medidas sustitutivas.
Sobre el empleo, destacó que un Alcalde y un Prefecto no solo hacen obra pública, donde dan empleo, sino que se empatan con las necesidades de sus mandantes, pero la obligación de generar empleo es del Gobierno Nacional y para eso es indispensable entender que debe haber un trabajo conjunto entre el Estado y la empresa privada.
“Es una estupidez vender los activos del Estado, hay que concesionar y hacer alianzas público- privadas, pero hay que negociar bien, caso contrario no se alcanza nada”, dijo.
También considera que hay que reducir el tamaño del Estado, renegociar la deuda ampliando el plazo y bajando los intereses y repotenciar el medio económico del país para dar empleo a los ecuatorianos.
Dijo al Alcalde, que no es una tarea fácil, pero Guayaquil es una muestra de que lo puede hacer, siempre y cuando se administre con normas claras y entendiendo que el dueño del dinero no es el funcionario público, sino el ciudadano.
“Es más fácil componer al país desde las ciudades, que esperar el milagro que lo compongan desde arriba, no hay que ser ingenuo, ni derrotista, pero se lo puede hacer”, dijo. (VHG)