National Geographic despide a sus últimos redactores y desaparecerá de quioscos en 2024

El declive de la publicación, que ha analizado la ciencia y el mundo natural durante 135 años, ha provocado que se decida volcar todo a lo digital y trabajar con freelancers.

Al igual que una de las especies en peligro cuya inminente extinción ha denunciado, la revista National Geographic ha seguido una trayectoria descendente, luchando por la vitalidad en un ecosistema cada vez más implacable.

El miércoles pasado, la revista con sede en Washington, que ha analizado la ciencia y el mundo natural durante 135 años, llegó a otro momento difícil al despedir a todos los redactores que le quedaban.

El recorte de plantilla afecta a un total de 19 redactores, a los que se notificó en abril que se iba a proceder al despido. A partir de ahora, los artículos se encargarán a freelancers o serán redactados por los editores. Los recortes también eliminan el pequeño departamento de audio de la revista.

Estos despidos son los segundos que se producen en los últimos nueve meses y los cuartos desde que comenzaron los cambios de propiedad en 2015. En septiembre, la empresa destituyó a seis redactores principales en una reorganización extraordinaria de las operaciones editoriales de la revista.

El personal saliente dijo que la revista ha reducido los contratos que permitían a los fotógrafos pasar meses en el campo produciendo las imágenes icónicas de la publicación.

En una nueva medida de reducción de costos, los ejemplares de la famosa publicación impresa de color amarillo brillante dejarán de venderse en los quioscos de Estados Unidos a partir del año 2024, según anunció la empresa en un comunicado interno el mes pasado.

Craig Welch, redactor de National Geographic, se hizo eco del momento en un tuit el miércoles: “Acaba de llegar mi nuevo National Geographic, que incluye mi último reportaje, el decimosexto y el último como redactor jefe… He tenido mucha suerte. He podido trabajar con periodistas increíbles y contar historias importantes y globales. Ha sido un honor”.

La trayectoria actual de la revista lleva años gestándose, impulsada sobre todo por el declive de la prensa escrita y el auge de la información digital. En el mundo a la velocidad de la luz de los medios digitales, National Geographic ha seguido siendo un producto casi artesanal: una revista mensual cuyas fotos, gráficos y artículos eran a veces el resultado de meses de investigación y reportajes.

En su mejor momento, a finales de los años 80, National Geographic llegó a tener 12 millones de suscriptores en Estados Unidos y millones más en el extranjero. Muchos de sus devotos saboreaban tanto su iluminación de otros mundos –el espacio, las profundidades del océano, partes poco vistas del planeta– que apilaban los números antiguos en pilas que abarrotaban desvanes y sótanos.

Sigue siendo una de las revistas más leídas de Estados Unidos, en una época en la que las revistas ya no se leen tanto. A fines de 2022, contaba con algo menos de 1,8 millones de suscriptores, según la prestigiosa Alliance for Audited Media.