Monegascos despidieron conmovidos a Rainiero

MONACO

Los monegascos despidieron conmovidos al monarca omnipresente que los goberncomo un «padre» y «jefe», en la Plaza del Palacio y en varias iglesias, como la de Santa Devota, pero en especial hacia la noche en la tima misa de ruiem en la Catedral.

Hubo tanta gente, que la misa fue vista en pantalla por centenares de locales que se quedaron fuera: ancianas, nis, viejos, mujeres elegantes, funcionarios, que segun subiendo a prisa.

«!Ya no hay m lugar», gritun polic a m de un centenar de monegascos que esperaban en la tarde entrar a la Catedral, con capacidad para 800 personas, ya a reventar media hora antes de que se iniciara la tima misa en memoria del Prcipe.

La ciudad estuvo este viernes solitaria, con todos los comercios cerrados y so se vieron por las calles las caravanas de autos de dignatarios internacionales y locales escoltados por motociclistas. Adem el incesante pasar de helicteros.

En la tarde, el pueblo en masa subipor «La Rampa» hacia la Catedral, pasando por las peques calles de la vieja Maco, como el Pasaje de la Misericordia o la Plaza Don Pedriero, vestidos todos de negro.

La multitud se apescfrente a la iglesia dos horas antes y entrpoco a poco hasta llenar la Catedral totalmente.

Al frente hab coronas de los reyes de Suecia y de Espa y al lado centenares de coronas, entre ellas del Equipo Cousteau, la familia griega Niarchos, Bacardi-Martini, Sociedad de Bas Marimos, la Asociaci de Jubilados o la Uni de Mujeres de Maco.

En la mana los monegascos no quisieron subir al «Pen» donde estel Palacio y la Catedral, por temor a que hubiera mucha gente en la Plaza del Palacio, que conta la hora del cortejo con muchos nobles y dignatarios y muy poco pueblo local.

«Vonos a la casa a verla por televisi», dijo una mujer decepcionada y una anciana lamentno haber venido en la mana y quedarse fuera en la tarde.

«En la mana no subinadie y ahora miren esto», dijo furiosa en un corrillo de matronas rodeadas de sus hijos.

Personalidades del mundo entero y centenares de monegascos participaron a mediod en los solemnes funerales del prcipe Rainiero III, muerto el 6 de abril pasado, a los 81 as, despu de 56 as de reino.

En la mana el cortejo febre con los restos del prcipe entra la Catedral seguido por el prcipe heredero Alberto II, las princesas Carolina y Estefan y Andrea Casiraghi, hijo mayor de Carolina, entre otros nietos de Rainiero, ascomo por su hermana, Antoinette.

El catafalco fue cubierto por la bandera roja y blanca monegasca y su blas y fue colocado ante el altar, escoltado por siete carabineros con sus cascos azules empenachados de rojo.

Carolina y Estefan estaban abatidas y limpiaban sus lrimas con paelos blancos. El heredero Alberto II no pod contener sus lrimas.

Seg las autoridades, despu del solemne funeral en la Catedral y de la misa de ruiem, la inhumaci de Rainiero III serdespu, en la m «estricta intimidad familiar», al lado de la tumba de su esposa Grace de Maco, fallecida accidentalmente en 1982.

AFP