Ellos reiteran su derecho de conocer primero sobre estos hechos. El martes concluirían los exámenes genéticos.
Familiares del equipo periodístico de diario El Comercio, secuestrado y asesinado en la frontera norte por la banda liderada por alias ‘Guacho’, viajaron al centro forense de Cali, en Colombia, para verificar si los cuerpos hallados en Tumaco corresponden a Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra. La delegación la integran, además, funcionarios de la Fiscalía, Ministerio de Interior y de Inteligencia.
Los peritajes forenses que permitirían identificar los cuerpos se presentarían la próxima semana, según un comunicado del Gobierno de Lenín Moreno en el que recoge un pedido de los familiares de “respetar los tiempos que Medicina Legal ha establecido antes de revelar los resultados de los exámenes que se realizan a los cuatro cuerpos hallados en la zona de Tumaco”.
“Según las autoridades (de Colombia), los resultados los darán a conocer entre el lunes o martes de la próxima semana, dependiendo del avance de las investigaciones forenses”, señala el pronunciamiento oficial emitido al borde de la medianoche de este viernes 22 de junio.
Ricardo Rivas, hermano de Paúl, cuestiona que una vez más los familiares se hayan enterado por redes sociales. “El compromiso con el Gobierno ecuatoriano y colombiano era que ellos iban a informar por sensibilidad, por humanidad, primero a las familias. Sin embargo, como vemos, el tuit salió de la más alta autoridad de Colombia sin pensar en la sensibilidad no solo de las familias sino del pueblo ecuatoriano. No es posible que nos sigamos enterando a través de un tuit y, en mi caso, por un medio colombiano que me llama a hacer una entrevista y enterarme nuevamente de esa manera de esta fatal circunstancia”.
Agregó que no conocían más detalles de cómo se realizó la localización de los cuerpos y adelantó que la noche del jueves ya se realizaron muestras de ADN de los familiares, bajo la debida cadena de custodia.
El procedimiento
Santiago Chávez, viceministro de Movilidad Humana, informó que Cancillería dispuso que los cónsules de Ipiales y Bogotá se trasladen al centro forense de Cali, donde se realizan los análisis científicos de los restos. “Vamos a seguir coordinando con las autoridades colombianas, especialmente con las Cancillería, todas las acciones que sean necesaria para llevar adelante los procedimientos que son indispensables para la repatriación de los cuerpos en caso de que los análisis sean positivos”, dijo el funcionario.
El fiscal ecuatoriano
Wilson Toainga agregó que en la delegación se encuentran expertos forenses para seguir la diligencia y la documentación de rigor para que los cuerpos sean devueltos al país.
EL DATO
Los voceros de los familiares del equipo periodístico manifestaron desde el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Cali que los resultados de las pruebas genéticas estarían el próximo martes. Para Xavier Andrade, abogado de los familiares, el que se confirme la identidad de los cuerpos no implica que el caso se cierre ya que queda pendiente conocer cómo se desarrolló la investigación que se ha realizado en Ecuador y Colombia. “No creemos que este sea el desenlace de una historia, sino al contrario”, dijo. Manifestó que las familias merecen conocer la verdad de todo el caso desde el momento mismo en que fueron secuestrados hasta la presente fecha. “Este no es un crimen ordinario, este es un crimen que le interesa saber a la sociedad en su conjunto; un crimen en el cual aparecen las secuelas de una delincuencia organizada trasnacional que no ha sido debidamente identificada y sobre todo de la cual Ecuador no ha estado al margen”.
Según un reporte de Diario El Tiempo de Colombia, Alexander Durán, secretario de Salud de Cali, manifestó que el centro de Medicina Legal a donde fueron trasladados los restos, cuenta con equipos y personal necesario para identificar incluso cadáveres que han estado en un largo proceso de descomposición. De acuerdo con el funcionario, el tiempo estimado para la obtención de resultados depende de la técnica utilizada para identificar los cadáveres y si se recurre al ADN los resultados se tendrían entre dos y tres días.
Mientras que el Ministro del Interior ecuatoriano, Mauro Toscanini, indicó que las pericias forenses son de varios tipos y no se reducen al ADN, ya que dependiendo de las circunstancias pueden incluir huellas dactilares o de identificación odontológica.
Un pedido especial
Yadira Aguaguallo, pareja de Paúl Rivas, informó que los familiares de Óscar Villacís y Katty Velasco, la pareja secuestrada por la banda de alias ‘Guacho’ en abril de este año, se comunicaron con ella para pedirle que, aprovechando el viaje a Cali, los busquen allá.
“Óscar Villacís y Katty Velasco siguen secuestrados y no podemos permitir que eso siga así, no podemos permitir que sus familias no reciban información, que no tengan a quién preguntarle dónde están”, dijo Aguaguallo.
Asimismo, los familiares del equipo periodístico asesinado reiteraron que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos está al tanto de los últimos hechos y que una misión trata de trasladarse hasta Cali.
Otro punto fundamental al cual apelan es la coordinación. “Es inaudito que Twitter sea la forma de comunicación de dos gobiernos en un tema tan delicado. Paúl, Javier y Efraín se merecen más que un tuit”. (HCR/DAB)
Ministro Toscanini: cuerpos estaban en una fosa rodeada de minas
° El ministro del Interior, Mauro Toscanini, confirmó ayer que existe entre un 80% y 90% de alta presunción de que los cuerpos hallados en Tumaco, en Colombia, correspondan a los miembros del equipo periodístico. Lo dijo tras un contacto telefónico con Luis Carlos Villegas, ministro colombiano de Defensa. La Cancillería del país vecino también se manifestó sobre ese nivel de presunción.
Toscanini indicó que, de darse una confirmación definitiva sobre si los restos son los de Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra, el Ministerio de Justicia deberá encaminar los más rápido posible los trámites de repatriación de los cuerpos.
También relató que su similar de Colombia le manifestó que los restos fueron detectados por canes militares cuando habían quedado enterrados en una fosa común, en una zona selvática y rodeados de minas.
Hay un cuarto cadáver. “Sería alguien del mismo grupo de Guacho que habría sido posiblemente ajusticiado”, dijo el ministro ecuatoriano.
Toscanini manifestó que las pericias que se deben practicar van desde verificación de ADN, huellas dactilares y por último identificación odontológica.