Redacción GUAYAQUIL
Muchas horas deben esperar los familiares de quienes fallecen en sus casas o en hospitales, por Covid -19 o por otra enfermedad, para el levantamiento del cadáver.
El protocolo implica que el servicio de Medicina Legal de la Policía y del Ministerio de Salud Pública (MSP), procedan a la diligencia.
Alexandra Ocles, titular del Servicio Nacional de Gestión de Riesgo, indicó el procedimiento para que el ciudadano lo entienda. Sin embargo, en Guayaquil, donde el número de fallecidos crece bien por coronavirus u otra patología, el problema se agudiza cuando los cadáveres no son verificados momentos después del deceso.
De ahí que moradores del sector Azuay y Gallegos Lara, suroeste de Guayaquil, denunciaron que el cuerpo de Ruben Polo, de aproximandamente 65 años de edad, permaneció en su casa por más de 18 horas.
Mónica Lino, moradora del sector, mostró preocupación por el posible foco de infección que podría propagarse en el sector.
Al parecer, un adulto mayor habría fallecido por un fallo respiratorio, pero mientras un exámen legal diga lo contrario, deben esperar para ser devuelto a sus familiares.
Casos como el de Polo se repite en otros sectores de la urbe porteña, donde los deudos insisten a las autoridades.
Esta mañana se conoció el fallecimiento del periodista guayaquileño Olmedo Méndez. El comunicador padecía de diabetes y al parecer se habría contagiado con el coronavirus. Sus familiares aún esperan el levantamiento del cuerpo.
El protocolo incluye la cremación de cadáveres con Covid-19 y está prohibida la velación, por lo que según las autoridades se realizan las coordinaciones del caso con las funerarias.
El Gobernador del Guayas, Pedro Pablo Duart, anunció que la cremación será gratuita con apoyo de la Junta de Beneficencia de Guayaquil y el camposanto Parque de la Paz.
Un último caso se denunció en Sauces 2, manzana 112, un cuerpo sin vida fue sacado de una vivienda envuelto en sábanas. Se desconoce si pereció por Covid-19 o alguna dolencia diferente.
El protocolo también indica que el cuerpo debe ser embalado en fundas plásticas y llevado hasta el crematorio.
Desde la declaratoria del estado de excepción con toque de queda este tipo de casos se ha venido repitiendo.
Hace pocos minutos se denunció un caso similar en una cooperativa Jaime Roldós, en la Prosperina. (DAB-JCL)