Contribuciones ciudadanas serán diferentes para servidores públicos y privados

Richard Martínez, ministro de Economía y Finanzas.
Richard Martínez, ministro de Economía y Finanzas.

250 millones de dólares anuales busca recaudar el Gobierno nacional con las ‘contribuciones solidarias’ que, el pasado viernes 10 de abril, anunció el presidente de la República, Lenín Moreno, como parte del Plan Ecuador Solidario con el que se enfrentará la crisis sanitaria y económica que está viviendo el país por el Covid-19.

La propuesta es que los trabajadores aportarán, durante 9 meses, conforme una tabla progresiva. Por ejemplo, las personas que ganen 500 dólares contribuirán con 2 dólares hasta quienes aspiren 250.000 que aportarán con 66.102 dólares.

En el caso de los empleados públicos, quienes ganen menos de $1000 se acogerán a la tabla y quienes tengan un sueldo superior a los $1000, deberán aportar el 10% de su salario; exceptuando personal de la salud, de seguridad nacional y educación. Este último grupo aportará dicho porcentaje, por un año.

Richard Martínez, ministro de finanzas dijo que a diferencia de otros países de la región Ecuador tiene cinco limitaciones para enfrentar la crisis: No tiene espacio fiscal. No tiene ahorros públicos. No tiene reservas internacionales suficientes. No tiene acceso a mercados y no puede expandir el crédito sin dólares.

Ecuador terminaría el año con un decrecimiento de cuatro puntos del PIB, algo que no sucedía desde el feriado bancario, en 199, explicó Juan Sebastián Roldán, secretario del gabinete presidencial, al reiterar que las aportaciones son necesarias para afrontar la crisis.

«Aquellos funcionarios que no pertenezcan a las áreas de salud, policía, fuerzas armadas y educación, que ganan menos de 1.000 dólares, se acogerán a la tabla de contribución humanitaria y aquellos que ganan más de 1.000 dólares, aportarán más: un 10% de su remuneración por un año».

Richard Martínez, ministro de Finanzas.

Empleos

Martínez se refirió también a un proyecto de ley de emergencia humanitaria, para que exista un acuerdo entre empleadores y empleados.

«Este régimen permitirá que todos los aspectos relevantes para el funcionamiento de la economía se puedan acordar, con la finalidad de preservar al máximo posible los trabajos y las fuentes de esos trabajos. Por ejemplo, para evitar despidos se podrán acordar nuevos salarios; se podrá acordar jornadas diferentes de trabajo, así como también extensiones de plazos y períodos de gracia para las deudas, reducciones de cánones de arriendo», explicó.