Confianza del CNE en debate ante una eventual consulta popular

Organismo. Actualmente se realiza un proceso de renovación parcial de los miembros del CNE.
Organismo. Actualmente se realiza un proceso de renovación parcial de los miembros del CNE.

Luego de las críticas en las últimas elecciones presidenciales, el Consejo Nacional Electoral deberá recuperar la confianza en un eventual proceso de consulta.

Luego de las críticas que recibió tras las elecciones presidenciales, el Consejo Nacional Electoral (CNE) volvería al centro de la escena. Esto si se concreta la propuesta de una consulta popular que piden varios sectores políticos y sociales y que está siendo valorada por el presidente, Lenín Moreno.

“Es imposible un proceso electoral normal y sin ningún tipo de problema cuando no cuenta la autoridad electoral con la confianza de los actores”, menciona Fausto Camacho, exconsejero del organismo electoral, quien recuerda la imagen de poca independencia que se dio cuando el presidente del CNE, Juan Pablo Pozo, fue condecorado por el expresidente Rafael Correa poco antes de dejar el poder.

Camacho incluso piensa que ni siquiera los miembros de Alianza PAIS tienen total confianza en esa dependencia. “Si es que hay consulta, siempre va a estar atravesada por la desconfianza del CNE, es un organismo que ha perdido más de la legitimidad de la que algún momento tuvo en el pasado”, dice. También está preocupado por el actual proceso de renovación parcial que atraviesa y que se definiría hasta noviembre. “¿En medio del proceso electoral van a hacer cambios de la autoridad electoral?”, se pregunta.

La analista política Camila Ulloa recuerda que según datos de opinión publicados por Lapop, la confianza de los ecuatorianos en el CNE es muy baja: tenía un 4,37% hasta 2014. Ella piensa que después de las últimas elecciones, la confianza disminuyó, por la apariencia de cercanía del CNE al expresidente y las irregularidades que sectores de la oposición denunciaron. “En el caso de una eventual consulta popular, considero que el CNE cumplirá un rol fundamental en la legitimación de procesos, por lo que debería garantizar la confiabilidad de esta institución devolviéndole la independencia y capacidad de veeduría”, señala Ulloa.

En esto último coincide Camacho: “De producirse una consulta, tendrá que propiciarse una participación ciudadana muy amplia, para que no deje de estar en cada una de las juntas receptoras del voto gente que garantice que el proceso de contabilización de los votos sea transparente”.

Capacidad operativa

La consejera Marcela Paredes, piensa que el CNE tiene la capacidad de organizar una consulta popular en 75 días, si es que se cumplen todos los requisitos legales para su realización. “Me parece que el tema de adquirir la legitimidad se lo va ganando día a día con cada una de las acciones, por supuesto, en la medida en que podamos sintonizarnos con los ciudadanos esta legitimidad será ganada”, señaló, al defender la capacidad del CNE de recuperar la confianza con sus acciones. (MMD)