Los precios subieron, pero el cliente no lo nota. Desde que entró en vigencia el incremento temporal del Impuesto al Valor Agregado (IVA), los comerciantes prefieren asumir la diferencia e incluso bajar los precios en las perchas para no perder compradores.
Un síntoma de esta realidad, según la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes), es el incremento de la inflación registrado en los productos gravados con IVA, que llega al 0,11% y 0,76% en mayo y junio, respectivamente, según cifras del Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC).
Según José Hidalgo, titular de Cordes, que la cifra sea menor al incremento del 2% en el IVA “podría sugerir que para evitar una caída en las ventas, los vendedores asumieron el costo del aumento en estos productos”.
Y, en efecto, durante un recorrido por varios locales comerciales del norte y el centro de Quito, este Diario pudo comprobar que en varios locales de ropa y electrodomésticos decidieron asumir la diferencia de precios y que, además, lanzaron varias promociones para evitar perder más ventas.
Según Andrés Reinoso, gerente de una tienda de electrodomésticos, el momento económico que atraviesa el país ha obligado a los ecuatorianos a repensar sus compras para no afectar a sus bolsillos. “La gente dejó de comprar. Antes se vendían unos 15 televisores cada semana, ahora, con suerte, vendemos 10 al mes”, dice. “Las ventas bajaron y parece que es porque la gente quiere cuidar su economía o tiene miedo de endeudarse y no poder pagar las cuotas”.
Generalizado
Con este testimonio coincide Diana Clavijo, cliente de este local. “La situación está difícil. Comprarme un televisor, que cuesta unos 800 dólares, y pagar a cuotas… mejor guardo el dinero y a lo mejor compro más adelante o voy a Colombia”, dijo.
En cuanto al incremento del IVA, en locales de ropa, como el de Carolina Escobar, decidieron asumir la diferencia. “Si yo importaba, digamos, unos 10.000 dólares en mercadería, ahora traer lo mismo me significa 200 dólares más”, cuenta.
“Al precio de la ropa que vendo en mi local debo sumar esos 200 dólares, también debo sumar lo que pago en servicios básicos, el arriendo, lo que pago por la importación y mi ganancia. Todo eso suma y hace que si antes, por ejemplo, vendía un jean en 50 dólares, ahora suba a unos 60 o 65 dólares”, explica la vendedora. Y agrega: “Pero esos 15 dólares extra me significan perder una venta y no recuperar ni lo que gasté”.
Otros incluso han recorrido a promociones. Recorriendo un centro comercial en el norte de Quito, locales que antes mostraban cocinas o refrigeradoras hasta en 1.200 dólares, ahora las venden con un 10% de descuento. En algunos casos estos descuentos superan el 30%.
Rodrigo Hurtado, encargado de uno de estos locales, mostró el caso de un televisor de 32 pulgadas que hace dos meses vendía en 800 dólares y que ahora está de oferta en 530. “A quedarnos con la mercadería en las bodegas, preferimos bajar el precio y rematar lo que nos queda”, justificó. (LGP)
Cifras
14%
es el IVA en el país tras la decisión del Gobierno.