Después que encontrara su automóvil incinerado en Manta, días después de que fuera reportado como robado en Quito, el activista y médico Carlos Figueroa, dice temer por su familia.
El lunes pasado recibió una llamada de la Policía de Manta, indicándole que localizaron su vehículo. “Aquí está su carro, pero totalmente quemado”, le dijo un oficial, según relató ayer el afectado a una estación de radio capitalina.
Cree que esta es una situación extraña. “Un amigo entre broma y chiste me dijo: ‘Verás, los únicos carros que han incendiado es el de la bomba de San Lorenzo y el tuyo’”, expresó Figueroa.
Admite que se reúne con activistas como Fernando Villavicencio, Cléver Jiménez o Andrés Páez, quienes fueron acérrimos opositores del Gobierno de Rafael Correa. “Son mis amigos, no tengo ningún problema en reunirme con ellos. Puede ser un mensaje, hay algo detrás de eso”, dijo.
Advierte que supuestas pruebas en su contra o de su familia podrían ser maquinadas por organismos de seguridad para hacerle daño. (SE)