Alegoría, una muestra de fe y gratitud de los ambateños

2017. Esta ocasión se denominó ‘Danos Señor familias santas’.
2017. Esta ocasión se denominó ‘Danos Señor familias santas’.

“Si hay algo que yo añoro de la fiesta es que, cuando era adolescente estaba en el grupo de jóvenes liderados por el padre Hugo Cisneros, y entre todos ayudábamos a armar y colocar la estructura sobre la que se colocaba ya la alegoría para la Misa de la Bendición de las Flores, las Frutas y el Pan”, dijo con mucho entusiasmo Juan Esteban Ortiz, ingeniero bioquímico de 37 años.

Ese es un recuerdo que comparte Daysi Flores, quien además cuenta que todo el armaje empezaba desde el jueves en la noche para que ya esté listo para el sábado en la mañana. “Eran tres días de malas noches espectaculares, definitivamente esos años jamás los voy a olvidar, era tan bonito que inclusive nuestros padres nos venían a ayudar y nos traían chocolatito para aguantar el frío, en la madrugada solo se escuchaban nuestras voces y nuestra risa lo que mostraba nuestra devoción hacia el Padre Todopoderoso y nuestro amor por la ciudad”.

Historia

Hay quienes señalan que la iniciativa de celebrar la eucaristía de gratitud y bendición nació al día siguiente del terremoto del 5 de agosto de 1949 cuando en el parque Cevallos, evidenciando la fuerza de la naturaleza y el dolor de los ambateños, el mercedario P. Erazo presidió una multitudinaria misa.

Gloria Castro, vendedora de frutas en el mercado Mayorista, recuerda que su mamá le contó que allá por 1950 o 1951 un grupo de vivanderas del mercado Central le solicitaron al padre diocesano de esa época, Rodolfo Ramírez, que bendiga sus puestos de trabajo y por su intermedio a sus clientes.

“Mi mamita un día lloraba contándome eso y desde ahí a mí me quedaron grabadas en la mente y en el corazón sus sabias palabras, que me enseñaron que uno de los valores más importantes del ser humano es la gratitud, por eso año a año yo, aunque sea con un granito de arena colaboro para rescatar esta hermosa tradición que tenemos en nuestra ciudad”, añadió la vivandera.

Así nació la bendición de las flores, las frutas y el pan, que es uno de los principales eventos de la Fiesta de la Fruta y de las Flores (FFF), cuya organización es coordinada por la diócesis de Ambato, que cada año pone un tema simbólico y relevante para rescatar los valores de la sociedad.

Monseñor Giovanny Pazmiño, señala que fue en 1962 cuando se decidió hacer más grande la eucaristía que, hasta la actualidad, celebraba la gratitud a la vida, la producción y la solidaridad de todos quienes hacen Ambato; desde entonces el atrio de la Catedral se convirtió en el espacio específico en el que todo un pueblo eleva sus manos a Dios en señal de agradecimiento.

Recuerda que en sus inicios la misa tenía un altar pequeño adornado con flores y unas pocas frutas, sin embargo, con el pasar de los años más gente fue involucrándose de manera voluntaria en esta creación y con sus hábiles y artísticas manos han llevado a hacer de la misa de bendición, con todos sus elementos, uno de los atractivos centrales de la FFF. (NVP)

La alegoría

Este es un gran arreglo, en que se utilizan flores y frutas, en el que se recrean imágenes y mensajes netamente religiosos, que se convierte en el tema central de la Misa de Bendición, que se realiza el sábado de fiestas.

“Esta es una gigantesca obra de arte que mantiene viva la fe de los ambateños y de la misma forma muestra la habilidad de quienes la diseñan y confeccionan como un tributo al Creador y a esta hermosa ciudad”, señaló monseñor Giovanny Pazmiño.

Cuenta que esta tradición se mantiene vigente debido a la dadivosidad de comerciantes y productores agrícolas, instituciones públicas y privadas que deciden donar las flores, frutas, pan y semillas andinas que se utilizan para darle vida a esta maravillosa pintura.

En la actualidad la creación de la alegoría se lleva a cabo en el Seminario Mayor, y para ello nuevamente se necesitan de manos bondadosas que se apuntan de manera voluntaria para ser parte de esta actividad.

El clérigo resaltó que este 2019 la alegoría lleva el tema de ‘Familia tu vocación es el amor’, tiene una dimensión de 159 metros cuadrados de construcción y por primera vez contarán con varias partes móviles. En ella se han utilizado 10 quintales de granos secos, 15 sacos de frutas, 15 planchas de pan y una incontable dotación de flores que mostrarán a la madre Teresa de Calcuta, la cruz de San Damián, una familia y una alusión al tema del aborto.

La FFF

El 17 de febrero de 1951 el Centro Agrícola Cantonal de Ambato empezó los desfiles de la Fiesta de la Fruta y de las Flores. El 18 de abril de 1962, durante la administración del presidente Carlos Julio Arosemena y su ministro de Gobierno Alfredo Albornoz Sánchez, ambateño, la Fiesta fue elevada a celebración nacional.