Ha sido un año tremendo, de película. El lector se ha sentado y ha podido encontrar en nuestras páginas historias de terror, amor, acción, robos y estafas, deportes y victorias, en fin, de todo. Dejamos en sus manos las ‘películas’ del año en el país y el mundo. Agarre su canguil y su cola, y revisemos juntos este año que se acaba. Quienes hacemos La Hora les deseamos un feliz año y disfruten la función. (O)
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Después de muchos años de descanso, el Cotopaxi se activó y puso en alerta a la población aledaña y de Ecuador.
Luego de 138 años de mantenerse en calma, el volcán Cotopaxi, considerado uno de más peligrosos del mundo, despertó en un nuevo proceso eruptivo para preocupación de las autoridades y de la población aledaña.
Caída de ceniza en zonas como Machachi y Quito generó preocupación y el Gobierno decretó el Estado de Excepción en todo el país por 60 días.
Entre los puntos principales del decreto se establecía la movilización nacional y la censura previa en la información, convirtiéndose el Ministerio Coordinador de Seguridad en la única voz oficial autorizada para informar del proceso eruptivo. Hubo quienes tuvieron que dejar temporalmente sus viviendas para albergarse en refugios, y cierta afectación de la producción agrícola.
En escuelas y colegios se comenzaron a realizar simulacros de evacuación, evidenciando que, en no algunos casos, hay poca preparación para enfrentar un fenómeno natural de esa magnitud.
La alerta amarilla se mantiene en poblaciones cercanas al coloso y todos viven con ‘un ojo puesto’ en el volcán Cotopaxi.
Los éxodos masivos fueron la tónica durante todo este mes. Un claro ejemplo fue la población Mulaló, ubicada en Latacunga, que terminaría siendo la primera a la que llegarían los lahares en una potencial erupción. Allí, decenas de familiares salieron huyendo apenas se enteraron de la nueva situación.
Durante varios meses, en escuelas y colegios de Quito, Rumiñahui y Mejía se realizaron simulacros ante esta eventualidad. El primero provocó una alta congestión en la autopista Rumiñahui. A pesar de eso, fue calificado como exitoso.
Cansados de la política del Gobierno, los sindicatos más grandes del país decidieron convocar a un paro nacional de actividades, al que se sumó el movimiento indígena, con un levantamiento. El principal generador de la protesta fue la propuesta promovida por el bloque oficialista de la Asamblea de enmiendas constitucionales vía tratamiento legislativo y no por consulta popular.
El paro nacional, convocado para exigir rectificaciones al Régimen, se cumplió en la mañana y la movilización, que fue en horas de la tarde, aglutinó a miles de personas en las calles de Quito que salieron a protestar en una jornada que se saldó con varios detenidos, heridos de los dos bandos y con el retiro de la visa de intercambio cultural a la activista franco-brasileña Manuela Picq, pareja de Carlos Pérez Guartambel, uno de los líderes opositores.
El presidente, Rafael Correa, minimizó las acciones de protesta y calificó de ridículos a sus promotores. Las marchas se mantuvieron en días posteriores.